Los familiares de las víctimas comienzan el reconocimiento de los cadáveres no identificados

La llegada a Madrid a mediodía de ayer de un avión de la compañía Avianca procedente de Bogotá en el que viajaban unos 50 familiares de las víctimas del accidente aéreo, permitió que a lo largo del día el número de cadáveres identificados ascendiera a 68. Otros 16 cuerpos sin identificar tuvieron que ser enterrados durante la tardé en el cementerio de Coslada ante el estado que presentaban y la imposibilidad de poderlos identificar.

El avión fletado especialmente para el traslado de familiares llegó al aeropuerto de Barajas a medio día. Entre los familiares se encontraban Narda Estella Hernández y William, hijos del comandante del avión siniestrado, Tulio Hernández. Ambos manifestaron, según informa la agencia Efe, que su padre tenía en su haber más de 35.000 horas de vuelo y que había trabajado 35 años en la compañía. La esposa del piloto no acudió al encontrarse convaleciente de una operación quirúrgica. Los súbditos colombianos se dirigieron, tras registrarse en un hotel cercano al aeropuerto, a la terminal nacional donde se muestran los enseres personales de los fallecidos y al hangar situado en la zona de la Muñoza para identificar a los cadáveres.Con el fin de agilizar los trabajos, el juez de Alcalá de Henares, encargado del caso, permaneció en el aeropuerto y a partir de las cinco de la tarde se dio permiso para que los familiares y amigos pudieran acceder directamente alhangar donde se encuentran los cadáveres, aunque no hubieran re conocido previamente ningún objeto personal. Allí, un miembro del equipo de identificación judicial es informado de las características personales de la víctima, tras lo cual recorren la sala. En caso de que la identificación sea positiva se avisa al juez, tras lo cual se inicia inmediatamente la tramitación de los documentos necesarios para el traslado de los restos. Según informaron en la oficina instalada al efecto, los trabajos de identificación continuarán "hasta que sea posible", aunque no se descarta que hoy el juez se vea precisado a ordenar la inhumación de nuevos cuerpos a causa de su estado. A última hora de la tarde se mantenía abierto el hangar aunque, según informaron fuentes cercanas al equipo de identificación, eran escasas las personas que acudían entonces para intentar reconocer a sus familiares. En la tarde de ayer fueron enterradas 16 de las víctimas por esta enterrados 16 cadáveres reconocibles. El secretario del ayuntamiento certificó el lugar exacto donde se introducían los féretros, que iban numerados.