El ministro danés de Exteriores puede verse obligado a presentar su dimisión
Unas imprudentes declaraciones del ministro danés de Asuntos Exteriores, Uffe Ellemann-Jensen, amenazan con provocar su caída y poner en difícil situación al Gobierno de Poul Schluter la próxima semana, cuando el Parlamento debata la cuestión.Hablando ante una reunión pública sobre la línea impuesta por la mayoría parlamentaria en el asunto de la doble decisión de la Organización del, Atlántico Norte (OTAN), el ministro dijo: "Me veo sometido a una dura prueba cada vez que debo viajar a una reunión de la OTAN y poner en ridículo a Dinamarca con una absurda política de seguridad que la oposición ha impuesto con el solo objeto de molestar al Gobierno".
Las declaraciones de Ellemann, recogidas por los principales diarios daneses, provocaron una airada reacción en la oposición y en la comisión de Asuntos Exteriores del Parlamento, al punto de que el ministro, que había viajado a Bruselas para una reunión de la Comunidad Europea, fue llamado por el primer ministro, Schluter, a Copenhague para una previsible reprimenda. Ellemann no tuvo otra defensa que culpar a los periodistas de haber citado mal sus palabras, argumento poco convincente por cuanto hubo coincidencia en la versión dada por la Prensa de sus palabras.
No se descarta que la oposición plantee una cuestión de confianza la semana próxima, cuyo resultado sería seguramente adverso para el ministro y el Gobierno.
