La creciente agitación social, telón de fondo del pleno económico de los comunistas polacos

El comité central del Partido Comunista de Polonia (POUP) inició ayer una reunión plenaria de dos días de duración dedicada a problemas socio-económicos, sobre un telón de fondo de creciente agitación social causada por el deficiente abastecimiento y las subidas de precios anunciadas para principios de 1984.Tanto el episcopado polaco como la dirección clandestina del sindicato Solidaridad se han pronunciado contra el incremento de los precios, que llega hasta un 50%, según los productos. Solidaridad, que prepara una gran campaña contra las medidas, ha pedido a los trabajadores que se dispongan a luchar contra ellas Los cálculos oficiales, según los cuales las alzas de precios provocarán un descenso del 4% al 6% en el poder adquisitivo de los polacos, están muy por debajo de la realidad, en opinión del dirigente de Solidaridad Zbigniew Bujak El episcopado, por su parte, ha culpado a las autoridades del deterioro de la situación económica y se ha mostrado preocupado por las "duras condiciones de vida de la población". Mientras tanto, en París, representantes de 16 países occidentales reemprendieron esta semana la renegociación de la deuda polaca. Estas negociaciones, interrumpidas tras la proclamación de la ley marcial en diciembre de 1981, se han reanudado en el marco de la suavización de las sanciones contra él régimen de Varsovia.

La situación económica polaca ha experimentado un empeoramiento en los últimos tiempos. La producción industrial ha descendido en 1983, afectando sobre todo al sector de bienes de consumo; la inflación para este año se calcula en un 25%, y la mantequilla se ha racionado de nuevo.