Europa tiene una nueva identidad, según la diputada italiana Luciana Castellina
"El significado de las manifestaciones pacifistas consiste en que, por primera vez en Europa, se han manifestado fuerzas amplísimas que tienen cierta unidad cultural, una línea política semejante; incluso concepciones organizativas idénticas, que trascienden las fronteras, incluso la separación entre Este-Oeste. Eso nunca ha ocurrido en Europa. Es una gran fuerza, un hecho histórico nuevo". Esta es la opinión de Luciana Castellina, diputada del Parlamento Europeo, diputada del Partido de Unidad Proletaria (PDUP) del Parlamento italiano y miembro del Secretariado de Coordinación de los Movimientos Pacifistas."Durante 25 años, y a pesar de todos sus esfuerzos, la Comunidad Europea no ha sido capaz de crear una identidad europea, y en cambio, en un plazo de dos o tres años, los movimientos pacifistas sí la han creado", señala Castellina.
Europa ha conocido las mayores manifestaciones después de la guerra y en todos los países la identidad europea era un rasgo común. Se trata de una fuerza nueva que no corresponde a los partidos tradicionales, incluso cuando se trata de militantes de esos partidos, en el movimiento de la paz adoptan actitudes nuevas que no son las típicas de los partidos; es una nueva cultura, una nueva manera de hacer política".
Para Luciana Castellina, puede afirmarse que es la primera vez desde el 68 que las masas juveniles salen a la calle "en el sentido de la participación masiva"; "pero hay una gran diferencia con 1968. El movimiento por la paz existe en países que no conocieron lo da 1968. Es decir, que es más amplio geográfica y socialmente".
Los movimientos de la paz occidentales ya se habían preocupado anteriormente de establecer relación con los movimientos del Este, dice la diputada italiana.
"Pero la actual reunión es muy importante porque demuestra que esos movimientos independientes empiezan a tener una existencia real en sus países.
Las movilizaciones en Occidente contra los dos bloques encuentran un eco correspondiente del otro lado. Claro que es difícil establecer estas relaciones por la falta de libertad en los países del Este. Sin embargo, los húngaros se mueven con más facilidad, y también en la RDA con el apoyo de la Iglesia. En otros países, la represión es más dura".
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