Un niño de 26 meses de edad, hospitalizado a causa de los malos tratos de su padrastro

El niño Javier Mora Herrero, de 26 meses, ha ingresado en el Hospital Provincial de Zaragoza, aquejado de contusiones en todo el cuerpo, calificadas de pronóstico reservado, y mordiscos en brazos y piernas. Las lesiones fueron causadas por los malos tratos producidos, al parecer, por su padrastro, ante la pasividad de su madre, deficiente mental y que se dedica a la mendicidad por las calles de la ciudad.

Los hechos han sido denunciados a la policía por el padre del niño, quien lo llevó a la casa de socorro para su cura; posteriormente fue encomendado al Tribunal Tutelar de Menores, que se ha hecho cargo del pequeño. El caso ha sido puesto en conocimiento del "correspondiente juzgado de guardia.El padre denunciante: conoció en 1980 a Concepción Mora Herrero, de 23 años, con la que mantuvo relaciones, fruto de las cuales nació Javier Mora. Al poco tiempo de conocerse, aquél ingresó en la prisión de Madrid, y posteriormente en la de Huesca, para cumplir una condena de año y medio. Mientras estaba en prisión recibió cartas de Concepción Mora en las que le anunciaba que había sido madre de un niño y que se había casado con otro hombre, Manuel León González Mellado, de 28 años, que también había estado en la cárcel de Zaragoza.

Al salir de la cárcel, el padre se dirigió al domicilio de la madre para conocer a su hijo y al hombre con quien vivía. La visita se repitió hace algunos días, y encontró a Javier con aspecto de haber sido maltratado y con señales de descuido, pues iba mal vestido y lleno de suciedad, por lo que decidió llevárselo a la casa de socorro y denunciar el caso a la policía.

Mendigaba con un niño

Ante esto, el padrastro se dio a la fuga, y la madre del niño aún intentó verlo en el hospital donde se recupera. Según han narrado redactores del periódico Heraldo de Aragón, el pequeño se echó a llorar cuando su madre intentó acercársele en el hospital, como si de una desconocida se tratara. Concepción Mora Herrero es deficiente mental y se dedicaba a la mendicidad por las calles de la ciudad, haciéndose acompañar de otro hijo pequeño. Se cree que Javier recibía malos tratos desde su nacimiento, hace algo más de dos años.