El Papa reabre el proceso beatificador de los 'mártires' de la guerra civil española

El papa Juan Pablo II ha levantado la suspensión del estudio de las causas de beatificación de los mártires de la guerra civil española que por motivos de oportunidad" habían decretado las autoridades del Vaticano durante el final del franquismo.Esta iniciativa del Papa permitirá que en cuestión de meses tres religiosas carmelitas de Guadalajara, de edades comprendidas entre los 23 y 24 años, sean las primeras víctimas de la guerra civil en ser declaradas mártires por la Iglesia católica, según precisó ayer en el Vaticano el cardenal Pietro Palazzini, prefecto de la Congregacion para la Causa de los Santos, durante una sesión plenaria del Sínodo de los Obispos.

El cardenal Palazzini presentó a los asistentes al sínodo la nueva legislación sobre las causas de beatificación y canonización, que concede importantes poderes a los obispos diocesanos. El prelado recomendó a todos los obispos mucha prudencia para evitar dar pasos inútiles.

Terminada la exposición del cardenal Palazzini, el vicario apostólico de Darien, Panamá, el claretiano Carlos María Ariz Bolea, natural de Marcilla, Navarra, preguntó por las causas de beatificación de los mártires de la guerra civil española.

En su respuesta el cardenal Pietro Palazzini destacó que para el estudio de las causas de beatificación es preciso el nihil obstat del ,Vaticano y que, a veces, por "razones de oportunidad" se deja en suspenso el estudio de unas u otras causas.

El cardenal Palazzini explicó que "el bloqueo de las causas de beatificación de las víctimas de la guerra civil española había sido decidido por las autoridades del Vaticano durante el régimen franquista para no provocar polémicas". "Una beatificación" agregó "debe servir para educar al pue blo, no para dividirlo".

El prefecto de la Congregación para la Causa de los Santos preciso que existen varios expediente de beatificación de víctimas de la guerra civil, principalmente el d un obispo y un grupo de sacerdotes muertos en un acto de odio contra la religión y el de las carmelitas de Guadalajara, que será proximanente, declaradas mártire. y beatificadas por el Papa en un plazo relativamente corto.