Enrique Marco, ex secretario general de CNT

En 1947 estaba formada la Alianza Nacional de fuerzas democráticas, integrada por UGT, CNT, el PCE y varios partidos republicanos. La CNT inició contactos con los monárquicos para conseguir que firmasen, junto con las formaciones integradas en la Alianza, un pacto contra la dictadura y por la restauración de la democracia. "Don Juan de Borbón, tras largo tiempo de conversaciones indirectas", dice Marco, "nos pidió que nos desplazásemos a Lisboa. Acabamos diciéndole que no comprendíamos el miedo que tenía a un pacto con nosotros, cuando él contaba con más posibilidades de propaganda y que sólo iríamos cuando se decidiese a firmar el pacto, pero no para un mero cambio de impresiones".Para influir sobre los monárquicos y también para favorecer la caída del régimen, la dirección de la CNT decide llevar a cabo alguna acción de fuerza espectacular. Tras un largo debate, se decide la voladura del edificio de las Cortes, el día 18 de julio, cuando Franco, junto con los ministros, se encontrase asistiendo al acto de clausura del período legislativo. Ello iba acompañado de la voladura simultánea de la Dirección General de Seguridad, en la Puerta del Sol.

Un miembro de la CNT que trabajaba en los servicios del alcantarillado de Madrid hizo un estudio de dónde se podrían colocar los explosivos, que serían de plástico. Se trataba de una gran operación que destruiría en gran parte ambos edificios mediante explosiones en la red de alcantarillado.

La CNT del interior hizo gestiones ante el sector de la organización en el exilio, con el que mantenían relación, para comprar los explosivos y también una importante cantidad de armas. Hay que recordar que la CNT del interior se había escindido de la que encabezaba Federica Montseny.

Las armas y los explosivos fueron conseguidos en Francia y habían de llegar en barco; una parte sería desembarcada cerca de Rosas y otra en el País Vasco. Se trataba, en total, de 40 kilos de plástico, metralletas y granadas.

Enrique Marco fue a Barcelona a entregar a sus compañeros un vale firmado por él y sellado, a cambio del cual les debían entregar el cargamento los tripulantes del barco que llegaría a Rosas. Extremó las precauciones hasta el punto de llevar con él el sello del comité nacional para no ser sorprendido durante el viaje con el documento escrito y preparado.

Fue detenido en Barcelona el 22 de mayo, junto con Ramón Álvarez, el secretario general del comité regional de Cataluña; al parecer, la policía desconocía la finalidad de las armas, pero pudo probar que las iba a recibir. Marco fue juzgado y pasó 17 años en la cárcel, después de haber sido inicialmente condenado a muerte.

A pesar de las penalidades que ha sufrido, aparenta menos edad de la que tiene y únicamente le molestan las cicatrices que conserva en el muslo derecho. "Son de una herida que me produjo un ametrallamiento aéreo en Bir-Hakeini (Libia)".

Ahora dedica su tiempo a escribir. Ya ha publicado dos libros sobre sus vivencias históricas, Condenado a muerte, sobre su estancia en la cárcel, y Todos contra Franco; la Alianza Nacional de fuerzas democráticas, sobre la oposición española en el período de 1944 a 1947.