Argentinos en España

Me siento obligado, como español y como antiguo residente en Argentina -concretamente en la ciudad de Buenos Aires, en la que he vivido por razones profesionales en el período 1966-1979-, a elevar una petición a las autoridades de este país.Se sabe que los argentinos en España han tenido y tienen dificultades para obtener la residencia: se les exige un visado especial, un poco sacado de las mangas, debido a nuestros serios problemas por tanta emigración suramericana, que se les requería hasta hace muy poco tiempo permiso de trabajo; en síntesis, que la legalidad de su permanencia en España se sumaba a los importantes conflictos, personales de orden social, económico, laboral, profesional y de cultura. El PSOE prometió regular este particular y solucionar las trabas administrativas impuestas por el anterior Gobierno. Pero aquí sí cambia de rumbo mi carta, y es a ,partir de lo siguiente que elevo mi petición.

Escasos días atrás vi salir de un portal a un personaje llamado Walter Klein, y más tarde, por la Gran Vía, al hijo del general Lanusse. ¿Quíénes son? Han sido copartícipes del caos económico en que viven hoy los argentinos. Formaron parte de las estructuras económicas en los Gobiernos de hecho de Lanusse y Videla.

El país debe estar prevenido ante la nueva emigración que, por las elecciones en Argentina, traslade su domicilio social. Conseguir en el consulado español el visado especial para estos individuos es muy fácil, pues sólo con demostrar una cuenta importante en dólares está solucionado el inconveniente.

Debemos ser equilibrados. Vendrán tantos Almirón, Cesarsky, banqueros y militares en retiro, con pasaportes oficiales o no, que este país se convertirá en el refugio de las dictaduras latinoamericanas. Confío en que la actual Administración estudie la solución de los antiguos problemas y la de los nuevos que se avecinan. /