La técnica de Vidrié

Vidrié rayó casi a la perfección en técnica y compostura de buen rejoneador. Había salido el segundo Cobaleda aquerenciado en tablas pero Vidrié supo sacarlo a los medios, para clavar con sentido de la medida y del temple.

Domecq se encontró con un toro, más fácil y menos brusco, por lo que no se evidenciaron la violencia y la rapidez que afloran otras veces en este caballero. Moura no pasó de irregular y torpe a pesar de la que gente se rompía las manos aplaudiendo. Sin embargo fue en el sexto, en pareja con Buendía, cuando se le vió más centrado, clavando al estribo. Javier Buendía, en el quinto, parecía Atila. Bastote y torpón, se dejó cornear un caballo al obligar al animal en unos terrenos que no eran los suyos. Por eso, cuando soltó al caballo en la muerte del cuarto, el pobre rocín buscó la puerta de arrastre entre coces y respingos de alegría, al verse liberado de la carga de un amo tan brutote.

Reaparición de Paco Ojeda

Paco Ojeda reapareció ayer en Sanlúcar de Barrameda. Toros de Cebada Gago. Sexto, premiado con vuelta al ruedo. Manzanares, oreja y ovación. Ojeda, dos orejas y rabo, y ovación. El mangui, oreja y dos orejas y rabo.

Marbella. Dos primeros toros de Carmen Ordóñez y los restantes del conde de la Corte. Antoñete, división y dos orejas. Manolo Cortés, silencio en los dos. Pepe Luis Vázquez, que fue cogido aparatosamente, palmas y silencio.

Pontevedra. Toros de El Cordobés. Tomás Campuzano, vuelta y ovación. Yiyo, bronca y oreja. Curro Durán, dos orejas y oreja.

Tafalla. Toros de Lora Sangrán. Antonio José galán, gran bronca y vuelta al ruedo. Morenito de Maracay, cuatro orejas. Pepe Luis Vargas, saludos y vuelta.

Tarragona. Toros de hermanos Peralta, nobles, terciados, pobres de cabeza. Julio Robles, oreja y vuelta. José Antonio campuzano, ovación y oreja. Espartaco, cuatro orejas.