La policía desarticula, una banda que estafó 176 millones mediante el 'timo del nazareno'

La policía judicial madrileña ha detenido a ocho presuntos autores de estafas por valor de 176 millones de pesetas, según informó ayer la jefatura superior. Los supuestos estafadores se dedicaban a la venta a bajo precio de zapatos y material de informática que habían comprado a crédito con nombre social falso, sin llegar. a pagar nunca a los proveedores. Este delito se conoce -como el timo del nazareno

En mayo pasado, inspectores de policía. tuvieron conocimiento de que una persona cuyo nombre corresponde a las siglas J. I. M. A., bilbaíno, de 49 años más conocido por el Iñaqui, y que es considerado el cerebro de la. banda, había puesto en marcha una organización dedicada a la realización de delitos económicos -los llamados de cuello blanco en medios policiales-, y que son difíciles de desarticular por la apariencia externa de legalidad y los escollos técnicos para el tratamiento penal, según la nota de la Jefatura Superior de Policía que dio cuenta de las detenciones.

Miembros de la policía judicial iniciaron investigaciones sincronizadas en diversos lugares de España, puesto que los ahora detenidos vivían en varios puntos del país. El resultada de este' trabajo policial fue la detención de siete miembros de la banda, uno de ellos en un local de la calle madrileña de Argos, donde procedía a la venta de zapatos, y el resto en distintos lugares de España. Posteriormente se detuvo al Maqui, cuando regresaba a Madrid desde Barcelona, donde había ido a retirar mercancías allí almacenadas. Según el resultado de las investigaciones, los presuntos delitos comenzaron con la compra a crédito de una partida de zapatos por valor de 27 millones de pesetas. Los zapatos fueron vendidos al público, pero el suministrador de la mercancía nunca recibió su parte, delito- conocido como el timo del nazareno.

Efectos ocupados

La policía ocupó a los detenidos calzado por valor de 20 millones de pesetas, letras de cambio falsificadas por importe de 1.975.000 pesetas, talones bancarios por valor de cuatro millones, escrituras referentes a la compraventa de terrenos valorados en 71 millones de pesetas y efectos y talones por valor de 53 millones de pesetas que eran avalados por una ficticia Caja Hipotecaria del Sur.