Un importante movimiento huelguístico pone en estado de alerta a las tropas en Brasil

Las tropas del segundo Cuerpo del Ejército de Tierra brasileño, con base en Sâo Paulo, fueron puestas esta madrugada en estado de alerta.Ninguna precisión oficial se difundió al respecto pero, según los observadores políticos, esta decisión fue tomada tras la huelga declarada desde hace dos días en la industria metalúrgica y en la más importante refinería brasileña, situada en Paulina, cerca del Estado de Sâo Paulo.

En Brasil, el estado de alerta es una medida que precede al estado de marcha, que prevé la intervención directa del Ejército en las tareas de mantenimiento de la seguridad.

El estado de alerta había sido decretado ya en Sâo Paulo en el pasado mes de abril a raíz de una serie de manifestaciones de parados. En aquella ocasión, sin embargo, las tropas permanecieron acuarteladas.

El jueves pasado, cerca de 70.000 trabajadores metalúrgicos se manifestaron en el barrio industrial de Sâo Paulo bloqueando durante tres horas la carretera que conduce a la ciudad de Santos, principal puerto comercial de Brasil.

Las autoridades federales reafirmaron en el curso de las 24 últimas horas que el mantenimiento del orden estaba garantizado por el Gobierno. El gobernador de Sâo Paulo es Franco Montoro, que pertenece a la formación más importante de la oposición, el Partido del Movimiento Democrático Brasileño.

Según los observadores, la situación actual es claramente más grave que en abril pasado. Cuando las fuerzas de seguridad se encontraban hace tres meses frente a bandas dedicadas al pillaje infiltradas entre los huelguistas y los manifestantes.

Las autoridades tienen que hacer frente en esta ocasión a un movimiento de huelga organizado que paraliza empresas vitales para la economía del país (fundamentalmente la refinería más importante de Brasil) y responder a las reivindicaciones de los trabajadores.