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Aterrizajes casi rutinarios en Brasil

Los portavoces diplomáticos están perplejos con el volumen de informaciones publicadas por la Prensa argentina y brasileña en torno a los aterrizajes que de forma rutinaria realizan Hércules C-130 ingleses que abastecen las Malvinas.Precisamente cuando estaba a punto de aclarar la situación, el Ministerio de Asuntos Exteriores brasileño recibió un nuevo golpe: un avión que se dirigía hacia las Malvinas aterrizó en la base aérea de Florianópolis, al sur del país, por encontrar dificultades para recibir combustible de un avión tanque Víctor.

En menos de 48 horas, dos aviones, cuya carga se desconoce por no haber sido revisada, han utilizado instalaciones militares brasileñas, comprobándose claramente que los vuelos son regulares y con consentimiento tácito de las autoridades brasileñas.

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Por el palacio de Itamaraty, circulaba un chiste en boca de los diplomáticos. "El vuelo de las ocho de la mañana es de emergencia. El de las diez de la noche es el humanitario". El rasgo de humor demuestra que la nota oficial divulgada por el despacho del ministro Ramiro Saraiva Guerreiro no era del todo cierta. En ella se aseguraba que sólo se habían concedido autorizaciones de sobrevuelo y aterrizaje en condiciones de emergencia y con fines humanitarios. Las fuentes diplomáticas comentaron que creerse que cerca de 40 aterrizajes fueron de emergencia es ignorar la inteligencia ajena.

Lo cierto es que los vuelos se suceden desde hace meses y no se revisa la carga. En el núcleo central del poder político-militar se comenta que no hay por qué extrañarse tanto ante los aterrizajes, una vez que los ministros del Ejército de Tierra y de la Marina parecieron demostrar ciertas simpatías por el Reino Unido durante el conflicto de las Malvinas. Es obvio, según las fuentes diplomáticas brasileñas, que se trata de simpatías personales, pues no se puede poner en duda el apoyo brasileño a Buenos Aires durante la guerra.

La gravedad de la crisis es palpable y portavoces diplomáticos argentinos en Brasilia dicen claramente que el incidente pone en discusión abierta y seria la actual relación entre los dos países, una vez que no se puede ignorar, cuando se habla de las Malvinas, que, aunque hubo cese de hostilidades, Argentina no firmó ningún papel en que reconociera el fin de las mismas.

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