La nueva prueba de balística admitida por el tribunal puede retrasar siete días el final del juicio contra Escobedo

La nueva prueba de balística admitida por el tribunal que juzga desde el pasado martes a Rafael Escobedo, presunto asesino de sus suegros, los marqueses de Urquijo, puede retrasar el final de la vista en siete días tiempo necesario para su realización. Fuentes policiales mostraron su disgusto por las continuas referencias del abogado defensor, José María Stampa, a que el informe pericial está manipulado y por el hecho de que se ponga en duda su dictamen balístico.

"Esta es la primera vez que se cuestiona un informe pericial en los 80 años que lleva funcionando el departamento de balística. Con ello no sólo se pone en duda esta unidad de elite de la policía, y con ella a la propia credibilidad de la corporación, sino que se duda de la propia administración de la justicia, que se basa generalmente en las pruebas que aporta el Gabinete Central de Identificación", señalaron las mismas fuentes cercanas a la dirección de la policía.Solventada el jueves (con acuerdo entre los psiquiatras de la acusación y de la defensa) la cuestión de que un individuo con personalidad inmadura y con afán de notoriedad, con deficiencias en su capacidad afectiva, intelectual y volitiva, y sometido a torturas psicológicas puede confesarse autor de algo que no es responsable -en este caso, del asesinato de sus suegros-, el tema se centra ahora en la única prueba física (o pieza de convicción, en la jerga judicial) que existe contra el acusado.

En concreto, se trata de saber si los dos casquillos de bala (ver el dibujo) objeto de la acusación -uno de ellos, recogido en la finca que los Escobedo poseen en la provincia de Cuenca, y otro, en el dormitorio de los marqueses fueron disparados con la misma arma. Las dudas razonables expuestas por el defensor y apoyadas en la desaparición de los casquillos y las balas inclinaron al tribunal a aceptar la petición de una nueva prueba balística.

La discusión se sustentó en el hecho de que Stampa sostuvo que la relación angular (los grados del arco entre las marcas que deja en el casquillo el percutor y el tope de expulsión) (difiere en 20 grados, lo que hace suponer que, aun siendo exactamente iguales las señales de los casquillos percutidos, éstos fueron disparados con armas distintas. Los peritos de la policía estiman, por el contrario, que dicha relación angular no es definitiva a la hora de identificar los casquillos, mientras que los peritos de la defensa, como suele ser obvio apoyaron la tesis del letrado.

Relación angular

Para Stampa y sus técnicos, toda relación angular que exceda de 10 grados supone la existencia de armas distintas. Y en apoyo de la tesis solicitó que fuesen percutidos 100 casquillos con una pistola similar a la de autos -una Star F Olimpic del calibre 22- con el fin de demostrar, de acuerdo con su creencia, que nunca se sobrepasa ese número de grados. La prueba se hará el lunes, y la única dificultad existente en el día de ayer consistía en encontrar un arma de esas características, ya que ni en el departamento de balística ni en la colección de armas de la policía existe ninguna igual. Los expertos consideraban la posibilidad de solicitar de un museo de Éibar un arma de la misma serie, con la que ya se realizó una prueba durante la elaboración del sumario.

Las fuentes policiales citadas declararon que, aunque acatan el mandato judicial de realizar este nuevo informe pericial, la prueba no tiene valor científico, a su criterio, ya que la única forma de establecer con exactitud si la variación de 20 grados es posible, en lo que se refiere al caso que se está juzgando, es disparando con la pistola con la que presuntamente se cometieron los asesinatos, arma que nunca apareció.

"No hay en todo el mundo dos armas iguales, como no hay dos huellas, dactitales iguales", manifestaron. "Cada pistola es en sí misma un universo, ya que la fuerza tangencial de la uña extractora sobre el exterior del casquillo provoca en ocasiones que el proyectil gire sobre su propio eje, sin olvidarse que en el proceso de fundición de una pistola, por ejemplo, hay siempre imperfecciones que analizadas debidamente nunca son iguales, aunque sean de la misma serie. La única posibilidad de saber si. dos vainas percutidas pertenecen a la misma arma es el examen de las marcas. Éstas son siempre, extraordinariamente iguales. El planteamiento de la prueba es igualmente incorrecto. Sólo tendría valor en el caso de que se hiciese con 100 armas distintas, no con una sola, ya que son muchas las circunstancias que pueden influir en un arma".

Credibilidad de la policía

La preocupación que mostraron las citadas fuentes policiales la fundamentaron en la posibilidad de que: el tribunal rechace esta nueva prueba y se siente jurisprudencia, lo que afectaría a la labor de la policía como auxiliar en la administración de justicia y a la credibilidad misma de ésta.

Expertos en balística consultados a este respecto por EL PAIS pusieron serios reparos a la posibilidad de que con una misma arma se produzcan diferencias angulares superiores a 10 grados, ya que eso significaría un grave defecto de la pieza que realiza la función expulsora de los casquillos y que conllevaría, con mucha probabilidad, un alto peligro para el tirador, debide al riesgo del escape de los gases producidos por la pólvora.

El nuevo informe balístico que emitirá la policía -en presencia de los peritos que señale la defensa-, y, que tiene aparentemente el carácter de decisivo, puede llegar a manos de la sala cuando la vista oral se dé por concluida si, como está inicialmente establecido, el tribunal decide no interrumpirla a la espera del nuevo peritaje.

No está decidido aún si se congelarán las conclusiones de la partes por este motivo a que el informe podría tener la consideración de una diligencia encargada por la sala.