_
_
_
_
TRIBUNALES

El ministro de Justicia anuncia en Barcelona nuevas formas de cumplir condena sin necesidad de ir a la prisión

Milagros Pérez Oliva

El ministro de Justicia, Fernando Ledesma, anunció ayer las innovaciones que contiene el anteproyecto de Código Penal como alternativa a la pena de prisión, durante el acto de clausura del simposio celebrado en Barcelona que, bajo el título de Probation, ha analizado los sistemas que rigen en otros países para cumplir condenas fuera de la prisión. La figura jurídica de la suspensión del fallo es la más importante de las innovaciones del nuevo código. El ministro visitó los terrenos de La Roca, donde está previsto emplazar la nueva cárcel de Barcelona, y anunció la construcción de otro centro que permitirá cerrar la Modelo.

El ministro de Justicia anunció que el anteproyecto de Código Penal trata de superar, en la medida que las estructuras sociales españolas lo permiten, el concepto retribucionista de la pena para aplicar criterios de prevención y utilidad de las penas de cara a la reinserción social del delincuente. Para ello, el nuevo código trata de recortar tanto el número de penas excesivamente largas, como las excesivamente cortas.Las alternativas contemplada en el nuevo Código podrán ser aplicadas a aquellos delincuentes condenados a penas de entre seis meses y dos años. La más importante de ellas es la institución jurídica de la suspensión del fallo, por la que una vez el tribunal ha dictado la sentencia, el fallo queda en suspenso y no se publica, con lo que se respeta el derecho del reo a presentar los recursos que crea convenientes.

Nueva ley y más medios

Según el ministro, "esta institución es una alternativa criminológica real que se acerca mucho al sistema de probation (puesta a prueba) que rige en la mayoría de países occidentales, y con especial éxito en los anglosajones, donde, entre otras medidas, se facilita trabajo comunitario y asistencia social a los beneficiarios; estas últimas medidas no están contempladas, por el momento, en el proyecto de reforma del Ministerio de Justicia español. La suspensión del fallo deberá aplicarse siempre según estos dos criterios: que la pena no sea grave- y, por lo tanto, que no supere los dos años, según la clasificación de penas del nuevo código- y que exista un pronóstico favorable, avalado por informes técnicos, de que el acusado no cometerá nuevos delitos.

Además de esta figura jurídica, los tribunales podrán, con carácter general y de acuerdo con la especificidad concreta de cada caso, conceder como alternativa a la pena el arresto de fin de semana o la imposición de una multa, aun cuando estas medidas no estén previstas en la tipología del delito de que se trate. Para que este nuevo planteamiento pueda ser aplicado con garantías de éxito, el ministro prometió que se dotará con mayores medios materiales y humanos a los juzgados de vigilancia penitenciaria. Momentos antes de la intervención del ministro, el juez de vigilancia penitenciaria de Barcelona, Antonio Doñate Martín, había intervenido en el debate de clausura del simposio para recordar que en toda España sólo hay en estos momentos 16 jueces de vigilancia penitenciaria para una población reclusa de 20.000 personas internadas en 80 centros diferentes. Algunos de estos jueces tienen bajo su responsabilidad centros penitenciarios que distan entre sí hasta 250 kilómetros. El juez Doñate recordó también que el único con dedicación exclusiva es él, pues el resto de jueces ejercen otras responsabilidades.

La principal preocupación de los participantes en el debate de ayer fue la falta de medios sociales suficientes para lograr la reinserción social del delincuente, la mayoría de la veces abocado a delinquir en cuanto sale en libertad para poder cubrir sus necesidades más perentorias.

Visita a La Roca

Antes de clausurar el simposio, el ministro quiso visitar los terrenos de La Roca donde está previsto instalar la nueva cárcel de hombres de Barcelona. Los terrenos están siendo sometidos estos días a pruebas de subsuelo. En la conferencia de prensa el ministro Fernando Ledesma anunció que a partir del día 1 de octubre se empezará a aplicar un plan de reordenación carcelaria que concluirá con la construcción de dos nuevos centros penitenciarios, uno en la Roca y otro en un lugar todavía por concretar, aunque ya se están estudiando varias alternativas, y el cierre definitivo de la cárcel Modelo.

El día uno de octubre se pondrá en marcha este plan con la habilitación de las nuevas dependencias de la cárcel de Lleida, el traslado a Wad-Ras de la población reclusa femenina y el traslado a la mitad de la cárcel Trinidad de los presos jóvenes que ahora están en La Modelo. En cuanto a la cárcel de la Roca, el ministro anunció que el proyecto técnico ya está terminado. Éste era el requisito que faltaba para iniciar los trámites de expropiación urgente del terreno.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_