Morán propondrá al Consejo de Ministros medidas para la repatriacion de los españoles que viven en la URSS

El ministro de Asuntos Exteriores, Fernando Morán, someterá al Consejo de Ministros una serie de medidas prácticas que permitan la reintegración en España de aquellos niños de guerra o exiliados en la URSS que deseen volver. Además, el Gobierno tiene prevista una ley de emigración a la que también podría acogerse el millar de españoles que sigue viviendo en la URSS. Según se informó ayer, es probable que el rey Juan Carlos visite la Unión el próximo invierno.

Morán planteó ayer ante el ministro de Asuntos Exteriores soviético, Andrei Gromiko, el problema de los hispano- soviéticos (todos ellos poseen en la actualidad ciudadanía soviética) que tienen algunas dificultades -según él mismo dijo- para salir de ese país y volver a España. Al, parecer, la acogida soviética a la sugerencia del ministro español fue considerada satisfactoria, si bien Gromiko no llegó a comprometerse.Morán afirmó que los nueve o diez casos de españoles que tienen alguna dificultad para salir de la URSS configuran un problema puntual que puede tener solución.

Por lo demás, el segundo y último día de la visita oficial de Morán a la URSS no dio mucho más de sí. Andrei Gromiko fue invitado a venir a España y se considera altamente probable que el rey Juan Carlos I vaya a Moscú el próximo invierno.

Entrevistas con Gromiko

Morán celebró ayer dos entrevistas con Gromiko -la segunda, por la tarde, muy breve y casi protocolaria- y se encontró también con el ministro de Comercio Exterior, Nikolai Patolichev.En lo que respecta a la parte política de las conversaciones, el ministro español expuso las tesis del Gobierno de Madrid sobre los problemas centroamericanos, escuchando de Gromiko las posiciones soviéticas, En este sentido no se avanzó ni un milímetro, ni se ofrecieron nuevas soluciones niposibilidades de mediación.

Sobre las cuestiones comerciales y económicas, Fernando Morán ha preferido seguir dejando en suspenso el acuerdo que a ese respecto había sido rubricado en 1979 y cuya firma fue aplazada a raíz de la invasión soviética de Afganistán. En este caso no han mediado razones políticas sino -según una persona que formaba par te de la delegación española- la consideración de que ese compromiso "no se adecuaba a las necesidades actuales". Responsables españoles y soviéticos se reunirán en julio y septiembre para tratar de buscar un entendimiento.

Por la tarde -antes de celebrar su tercera entrevista con Gromiko- Fernando Morán mantuvo un encuentro con la prensa extranjera y soviética. Como era de esperar, en esta conferencia el ministro español fue preguntado por corresponsales occidentales sobre la opinión de Madrid en torno al tema de los euromisiles y otros temas de política internacional.

Transpirando prudencia, el jefe de la diplomacia española afirmó que el Gobierno de Madrid "no se siente vinculado a la doble decisión" que puede dar, en su caso, luz verde a la instalación de estos cohetes, pero mostró su comprensión respecto a la postura de los países europeos implicados en el tema.

La conferencia de prensa de Morán no careció de un toque de humor involuntario cuando una corresponsal norteamericana interrogo al ministro sobre si había comentado los problemas de Andrei Sajarov -físico soviético y premio Nobel, actualmente desterrado en la ciudad cerrada de Gorki-, y Morán respondió que "el tema del Sahara no había sido incluido en las conversaciones con Gromiko".

Esta mañana, Morán saldrá hacia Leníngrado en visita privada, volviendo a Madrid -en vuelo regular de Aeroflot- el próximo viernes. Siguiendo la costumbre introducida por Moránn no habrá comunicado final.