Acuerdo entre España y la URSS sobre tráfico marítimo

Aunque en opinión de algunos funcionarios españoles hubiera sido preferible abordar también ahora el tema de las relaciones pesqueras, que es donde España se encuentra en inferioridad de condiciones respecto a Moscú, las "prisas" del ministro Morán por contar con un "éxito" durante su primer viaje a la URSS, han hecho que se divida el tratamiento de los temas y se solucione antes el más fácil, por su homologación internacional, como es el del transporte marítimo.Según han afirmado fuentes de la propia delegación que representaba al Gobierno español durante estas negociaciones, el acuerdo que fue rubricado ayer "no contiene ninguna cláusula secreta". El embajador de España en Moscú, José Luis Xifra, expresó, por su parte, su satisfacción por la conclusión del acuerdo, y calificó las negociaciones de laboriosas.

Representantes de los Ministerios de Transporte, Comercio, Exteriores y de las compañías navieras integraban el equipo que ha elaborado y negociado el acuerdo. Sobre su contenido, lo más importante parece la decisión de elaborar otro acuerdo sobre temas pesqueros, por el que España recibirá compensaciones a cambio de las facilidades que la flota pesquera de la URSS obtiene en el archipiélago canario. En ninguna parte del acuerdo rubricado ayer -afirmaron miembros de la delegación española- se hace referencia a las llamadas cartas Boado.

Condiciones favorables

A pesar de estas cartas nunca fueron hechas publicas, se sabe que contenían unas condiciones insólitamente favorables para la parte soviética. La razón de esta extraña generosidad para con un Gobierno con el que España no mantenía entonces relaciones, obedecería o bien a un simple despiste o bien a las presiones realizadas por clanes que dominaban el entonces incipiente: comercio con la URSS y que parecían tener buen acceso al palacio de El Pardo, residencia de Franco.Por lo demás, el texto rubricado ayer dibuja -según un portavoz de la Embajada de España en Moscú- el marco legal del tráfico marítimo, da el mismo trato en ambos países a ambas flotas y regula el tráfico marítimo entre los puertos de una parte y los de terceros países. En círculos diplomáticos españoles se cla especial importancia política a este acuerdo.