Concluido sin procesamientos el sumario por la muerte de dos niñas en una incubadora
El titular del Juzgado de Instrucción de Calahorra, José Enrique Mora, ha concluido. sin dictar ningún procesamiento la tramitación del sumario incoado a raíz de la muerte de dos niñas por el accidente de una incubadora en la clínica El Carmen, de Calahorra. Los hechos han sido calificados como constitutivos de imprudencia leve del director de la clínica. El sumario afirma que ha existido una falta de cuidado y de mantenimiento, en la incubadora.
Esta falta no se llega a determinar como imprudencia temeraria. El sumario ha sido enviado a la Audiencia Provincial de Logroño que podrá aceptar o modificar las conclusiones del juez. En caso de que sean aceptadas se celebraría un juicio de faltas para determinar la indemnización que ha de darse a los padres de las gemelas. Según el informe remitido al juez por la Delegación Provincial de Industria, la clínica cuenta con un servicio de mantenimiento que se limitaba a comprobar cada veinte días si existía alguna anomalía. En rigor, añade este informe, no puede hablarse de mantenimiento de la incubadora.El informe pericial aprecia la existencia de modificaciones esenciales en la incubadora, señalando que el circuito eléctrico había sido manipulado. La incubadora, comprada el año 1971, carecía de elementos de protección propios, como un interruptor diferencial o relés de sobreintensidad. El doble sistema de alarma, óptico y acústico, no funcionó al producirse el cortocircuito en el cuadro de control. La hipótesis que se avanza en este informe es que el accidente no fue causado por la resistencia eléctrica, sino por la falta de aislamiento de los cables eléctricos.
La Dirección Provincial del Insalud realizó un informe de la clínica El Carmen tras el accidente. En él se recoge que hay indicios suficientes para suponer que la clínica está asumiendo riesgos por encima de sus posibilidades técnicas y que existe un número insuficiente de personal sanitario para atender las 45 camas más el nido.
El accidente de la incubadora fue denunciado por el padre de las niñas dos días después, sin que en el juzgado tuvieran conocimiento previo del mismo, en contra de lo declarado inicialmente por el director de la clínica.
Estos hechos han sensibilizado a la población de Calahorra por lo que consideran una situación sanitaria lamentable. La Consejería de Sanidad de La Rioja ha declarado como prioritaria la construcción de un centro de salud, paralizado desde hace cuatro años por trámites burocráticos, a pesar de contar con subvención oficial para las obras.
