El nuevo acuerdo militar hispano-francés favorecerá la tecnología española de armamento
El ministro francés de Defensa, Charles Hernu, confirmó ayer que próximamente será renovado el acuerdo de colaboración militar hispano-francés firmado en 1970, con el objeto de incrementar la cooperación frente a problemas comunes en Europa y en el Mediterráneo, y para fomentar el intercambio tecnológico en el terreno armamentístico. "No se debe tratar de un orgullo por parte de Francia ni de un alineamiento por parte de España, sino de un verdadero acuerdo de cooperación", precisó Hernu. El ministro galo partió ayer por la tarde hacia París, tras una visita oficial de dos días de duración a nuestro país.
En el curso de una conferencia de prensa mantenida en la residencia del embajador francés en España, Charles Hernu señaló que la integración española en el sistema militar de la OTAN "es un problema de elección del propio Gobierno español", y precisó que, "cualquiera que sea su decisión, Francia desea desarrollar unos estrechos lazos de colaboración". En este mismo sentido, indicó que la relación del país vecino con la OTAN no puede entenderse como un modelo a seguir por España, si bien comentó que la independencia francesa en el terreno militar "puede animar a nuestros amigos a fijarse en ella".Con respecto a esa independencia, Hernu manifestó que el Gobierno francés no se ha planteado la posibilidad de ingresar en el aparato militar de la OTAN, ya que en la política del presidente Mitterrand continua vigente la disuasión nuclear, unida de forma inseparable a la defensa. "Soy el ministro socialista de la continuidad", afirmó. Agregó que "Francia es, a la vez, independiente y solidaria con sus aliados y, dentro de la OTAN, mantiene sus posibilidades de maniobra".
En cuanto a la revisión del acuerdo, señaló que su contenido no será antagónico respecto a los aliados de ambos países. Preguntado si el nuevo convenio podría entenderse como una futura alternativa al convenio de amistad hispano-estadounidense, contestó que "sería muy peligroso que se pudiera pensar eso, porque no tenemos ninguna vocación de sustituir a los Estados Unidos". Añadió que, en la revisión del acuerdo, "no ha sido evocada ninguna cláusula de defensa mutua" y anunció que el contenido del mismo deberá ser conocido, antes de su firma¡ por los jefes de Gobierno de ambos países.
El acuerdo firmado en 1970, todavía vigente, incluye un breve preámbulo en el que se indica que España y Francia están integrados en un mismo conjunto geográfico y mantienen intereses comunes en materia de seguridad. El preámbulo está acompañado de dos protocolos, el primero de los cuales hace referencia a la colaboración entre los estados mayores de las Fuerzas Armadas de ambos países, sobre todo en lo relativo a la celebración de maniobras conjuntas y a la presencia de observadores en ejercicios. El segundo preámbulo incluye el compromiso francés de favorecer la fabricación total o parcial de material bélico galo en España.
Gracias a este acuerdo, se han registrado numerosos ejercicios combinados y, en el terreno armamentístico, en España se han producido cerca de 200 carros de combate AMX-30 de patente gala y próximamente se fabricarán otros 100. Igualmente, en España se han construido ya seis submarinos bajo patente francesa. En el campo aeronáutico, España ha adquirido en los últimos años 102 Mirage 3 y F-1, por un valor total de 84.133 millones de pesetas, con unas compensaciones industriales de 16.870 millones.
Con la revisión, se incrementarán las posibilidades de colaboración entre las Fuerzas Armadas y, sobre todo, como han puesto de relieve Hernu y Serra, se favorecerán importantes aportaciones tecnológicas a la industria armamentística española. Tras despedir a Hernu, Serra comentó a los periodistas que la visita ha sido positiva para las expectativas de la industria militar de armamento, si bien dio a entender que el avión Mirage 2.000 ha sido desechado dentro del programa FACA
Durante la jornada de ayer, Hernu y Serra presenciaron en el campo de maniobras de San Gregorio (Zaragoza) los ejercicios que realizaron las Fuerzas Aeromóviles del Ejército de Tierra. En los ejercicios participaron cerca de 900 hombres, 150 vehículos todo terreno y 65 helicópteros, informa Javier Ortega.
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