El abad de Poblet no desea ser obispo

El abad de Poblet, Maur Esteva, ha redactado una carta en la que expresa claramente su deseo de no ser obispo de Tarragona, contra los rumores que han circulado en tal sentido."La manera de vivir de un abad cisterciense", dice, "es de orden predominantemente gallináceo: se va a dormir pronto y se levanta a buena hora ( ... ). Por contra, la vida de un obispo se parece más bien a una ave nocturna, cuando más trabaja es cuando anochece ( ... ), la noche urbana es febril y el pastor tiene que estar activo"

La vinculación a la Iglesia no es óbice para "manifestar con orgullosa modestia las exigencias de nuestra personalidad colectiva", dice el abad, quien hace un juego de palabras sobre "la psicosis de cambio" y reconoce que la historia presenta varios casos de abades nombrados obispos, y considera que el modo de vida monacal no es compatible con las necesidades episcopales.

La carta, que se subtitula Cuando los periodistas promueven abades al episcopado, se pregunta por qué los periodistas se fijan tanto en los abades catalanes y no en los curas, aunque acepta que las tareas que, algunas veces, han protagonizado los abades los han llevado al "escaparate eclesiástico".