_
_
_
_

El Gran Magreb objeto de la próxima entrevista entre Chadli y Burguiba

Pocas semanas después de haber iniciado el proceso de normalización con el vecino reino de Marruecos, el presidente de Argelia, Chadli Benyedid, se trasladará esta semana a Tunicia para reforzar la idea del Gran Magreb, susceptible de abrir una era de prosperidad económica y estabilidad política entre los tres países.Sin entrar en polémicas- acerca del protagonismo del rey Hassan II de Marruecos en el proceso de edificación de ese Gran Magreb que añoraba en su día el fallecido Huari Bumedian, el actual jefe del Estado argelino, hombre parco en palabras y apagado en sus gestos públicos, trata de reformar los tradicionales lazos de parentesco que unen a los tres pueblos norteafricanos y decrispar definitivamente sus relaciones.

Harto lejos parece estar la época (inicios de 1981) en que el fallecido jefe de la diplomacia argelina, Mohamed Seddick Benyahia, interviniendo ante una sesión especial de la Asamblea Popular Nacional de este país, consagrada a la política exterior, declaraba textualmente: "Los rumores acerca de supuestos contactos con Marruecos tratan de quitar importancia a las victorias aplastantes de la República Arabe Saharaui Democrática (RASD).

En la actualidad, los dirigentes argelinos no ocultan que una de las prioridades de su acción exterior es normalizar sus relaciones con Marruecos y fortalecer las ya existentes con Tunicia, sin sacrificar de manera alguna al Frente Polisario.

En espera de esa solución negociada sobre el conflicto del Sahara occidental, los dirigentes argelinos han considerado necesario y sagaz romper el hilo de las relaciones con el vecino reino de Marruecos. El restablecimiento de los lazos diplomáticos es esperado en una fecha que se situaría antes de la celebración de la próxima cumbre de la Organización para la Unidad Africana (OUA), prevista en junio en la capital de Etiopía.

Complementariedad económica

En esa misma línea de acción, la visita a Tunicia de Chadli consagra, no ya los lazos personales que le unen al combatiente supremo, el venerable Habib Burguiba, sino que tienden a sentar las bases de una complementariedad económica que buscan todos los países del Magreb.En febrero de 1980, la invasión abortada de la localidad tunecina de Gafsa por un grupo de hombres armados que había transitado por Argel como simples turistas había enfriado considerablemente las relaciones entre los dos países magrebíes.

Hace pocos meses, el inconsiderado trato dado por los tunecinos a los turistas argelinos obligó a Argelia a limitar las salidas al vecino país.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_