Detenido el presunto autor de la muerte del joven que falleció en Blanes tras una reyerta

Tres nuevas detenciones de trabajadores africanos se registraron ayer en relación con la muerte del joven Rafael Cambón, ocurrida en Blanes en la madrugada del pasado domingo en un enfrentamiento entre muchachos blancos y negros. La Policía Municipal detuvo a Mahame Sumare, de veintisiete años, y a Ebruna Donidelleh, de veinticinco. El primero fue dejado en libertad provisional anoche, mientras el segundo permanecía detenido en las dependencias de la Policía Municipal, al parecer, como presunto autor material de la muerte. También fue detenido y liberado Fidi Bayo.

El primer detenido fue Mahame Sumare. Su participación en la pelea del domingo fue comunicada a la Guardia Municipal de Blanes por uno de los dos jóvenes que el juez dejó en libertad provisional anteanoche, de los cinco que habían sido detenidos inicialmente. En sus declaraciones a la Guardia Municipal, Sumare implicó en la pelea a Ebruma Dombelleh, que fue localizado y detenido en la urbanización Canyelles, de Lloret de Mar.Ninguno de los dos detenidos admitió en sus declaraciones ser el autor material de la muerte del joven Rafael Cambón. Sumare declaró que el portador de la navaja automática era Ebrune, y este declaró que Sumare era el autor de la agresión con una botella rota que sufrió uno de los jóvenes blancos.

Pantalón con manchas

La Policía Municipal registró la habitación que Ebrume ocupaba en una pensión y halló la ropa que, llevaba el domingo, ya lavada, pero con restos de manchas de sangre. Una vez tomadas las declaraciones y reunidos los objetos que pueden constituir prueba en el sumario del caso, ambos detenidos fueron conducidos a la sala de plenos del Ayuntamiento de Blanes, donde permanecieron el resto del día atados a uno de los bancos de la sala.A últimas horas de la tarde fueron trasladados al Juzgado de Santa Coloma de Farners. La decisión de que permanecieran en la sala de plenos del Ayuntamiento fue justificada por la alcaldesa con el argumento de que el depósito municipal se encontraba ocupado por otro detenido, ajeno a la pelea del domingo, que estaba muy alterado y presentaba una gran agresividad.

Sobre las once de la noche, el juez dejó en libertad provisional a Mahame Sumare y ordenó que Ebruma Dombelleh fuera conducido a las dependencias de la Policía Municipal de Blanes. Mañana será conducido de nuevo al juzgado para continuar su declaración. El juez señaló anoche al respecto que Ebruma Dombelleh había efectuado "declaraciones importantes", aunque no quiso ni confirmar ni desmentir que el acusado pudiera ser el autor material de la muerte del joven Rafael Cambón.

Un tercer detenido

También presuntamente relacionado con el suceso de Blanes, la Guardia Civil de Premià de Mar detuvo ayer por la mañana en esta población a Fidi Bayo, de diecinueve años de edad. Sobre esta detención surgieron dos versiones. Según la primera, Fidi Bayo fue detenido cuando intentaba comprar un billete de avión con destino a las islas Canarias. La segunda apunta a que fue detenido en el domicilio que comparte con varios compañeros africanos.El detenido fue llevado ante el juez de Santa Coloma de Farners que instruye el sumario, quien, tras tomarle declaración, decidió dejarlo en libertad provisional a últimas horas de anoche.

A pesar de que las primeras investigaciones y detenciones han sido realizadas por la Policía Municipal por ser ella la que intervino para poner fin a la pelea, el juez ordenó que las diligencias fueran practicadas por la Guardia Civil, porque cuenta con un equipo de atestados con una preparación mejor. Preguntado sobre el estado de las investigaciones, el juez se mostró remiso a informar alegando secreto sumarial.

Declaran los jóvenes blancos

Ayer, por primera vez, fueron llamados a declarar jóvenes blancos presuntamente implicados en la pelea. En total fueron doce los conducidos ante el juez para que prestasen declaración. El hecho de que no hubieran sido llamados a declarar los presuntos implicados blancos, cuando habían sido detenidos unos cuarenta africanos en las horas siguientes a la pelea, fue causa de malestar y temor entre la comunidad de color.Algunos de aquellos detenidos consideraron denigrante la forma en que fueron practicadas las detenciones. Entre las pensiones que ocupaban y el cuartel al que fueron conducidos median unos 1.500 metros de distancia. Los detenidos tuvieron que recorrerlos a pie y en hileras. El gobernador civil justificó las detenciones alegando motivos de seguridad. Ante la posibilidad de que se crispasen los ánimos, el gobernador decidió que se practicasen las detenciones con carácter preventivo. Sobre la manifestación celebrada tras el entierro, en la que se profirieron gritos racistas, el juez manifestó ayer que "no tenía ni pies ni cabeza, y menos protagonizada por un partido de izquierda".