Sobre los funcionarios de elite

Sería un error juzgar a todo un colectivo profesional por culpa de un núcleo de fariseos que ensombrecen la imagen y credibilidad de los demás. La culpa corporativa está en haber tolerado a semejantes elementos, que han convertido la Administración pública en un coto privado; razón tenía el dictador, en su entrevista con el canciller alemán Erhard, en bautizarlos como "mafia funcional" respecto al milagro alemán y las dificultades que había en España para imitarlos.Quién lo hubiera dicho, en tiempos pretéritos, que llegaría un día en que dicho núcleo se serviría de una vulgaridad como la huelga para, seguir reivindicando sus privilegios y prebendas. Sus argumentos y justificaciones, y ante dos millones de parados y la situación del país, sólo ensombrece más sus valores (?) y la posibilidad futura de mejorar su imagen y credibilidad.

Lo de elite sólo hay que interpretarlo, por los emolumentos que han ganado y ganan. Por lo demás, no creo que exista ningún merecimiento, dado el historial que tienen.

Esperemos que en el futuro se pueda colocar a cada cual en el lugar que le corresponde; el país lo demanda y lo necesita para mejorar unos cimientos tan carcomidos. / Enrique Tello.