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La CEE pone a punto un documento para acelerar la union política de Europa

Andrés Ortega

ENVIADO ESPECIALLos diez países de la CEE (Comunidad Económica Europea) pueden firmar en la cumbre de junio, en Stuagart, la tan esperada acta europea sobre la unión política, si bien en forma más diluida que el plan de 1981 de Italia y la República Federal de Alemania. Se trata de relanzar dinámicamente el proceso de integración europea. Los ministros de Asuntos Exteriores de los diez se reunieron ayer en Bonn, en el marco de la cooperación política en la CEE para tratar este tema.

Si bien no con unanimidad, los diez se mostraron moderadamente optimistas ante la posibilidad de concluir en la CSCE (Conferencia sobre Seguridad y Cooperación en Europa), en Madrid, con un documento final equilibrado que abriera la puerta a un "mandato preciso sobre una conferencia de desarme en Europa".

En la peculiar relación política entre la CEE y España no le correspondía a ésta estar presente en esta reunión de cooperación política europea, de la que será informada. Es en este marco informal en el que los diez coordinan su política exterior, en aquellas cuestiones en las que se pueden poner de acuerdo. La cuestión del acta europea, en este semestre en el que la RFA ejerce la presidencia de la Comunidad, dominó las discusiones de la tarde. El ministro francés Claude Cheysson habló de una "solemne declaración europea", que podrían firmar los diez al nivel más elevado, es decir, en la cumbre europea de junio, ya que la presidencia alemana insiste en concluirla antes de que expire su mandato.

El texto del acta prevé en principio una mayor colaboración en todos los campos, incluidos los de seguridad, las legislaciones nacionales, la economía y las finanzas, la cultura y la política exterior. Los mayores problemas que subsisten en el plan Genscher-Colombo presentado en 1981, y que ahora parece haberse remozado, siguen siendo el principio del voto por mayoría -y no por unanimidad- en los Consejos de Ministros que no logren llegar a un consenso.

Las mayores reservas ante estos planes provienen de Dinamarca y el Reino Unido -que quieren defender con el derecho de veto sus intereses pesqueros y sus protestas sobre la contribución al presupuesto comunitario-, y Grecia, que quiere preservar sus intereses de carácter general (y especial respecto a la colaboración con Turquía).

Los diez abrieron su debate de ayer con el tema de las relaciones Este-Oeste, dando muestras de optimismo -no compartido por Bélgica- de cara a un resultado sustancial en la Conferencia de Madrid, donde mantienen una política unitaria. Los comunitarios valoraron como positiva la Declaración de Praga del Pacto de Varsovia.

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Las fuentes comunitarias han observado un progreso en dos temas precisos: el libre acceso a las embajadas extranjeras y a las suscripciones a periódicos extranjeros, al tiempo que mostraron su interés sobre un mandato preciso para una conferencia de desarme y medidas de confianza en Europa "que interesa al Este".

Sobre la cuestión de Oriente Próximo no habrá una nueva iniciativa europea. Los diez siguen apoyando el plan Reagan y el plan de Fez, apoyando una autodeterminación palestina. Comentando el Consejo Nacional Palestino que se reunió en Argel, Cheysson se felicitó de "la unidad del movimiento palestino sin que su líder, Yasir Arafat, se haya tenido que atar las manos de cara al futuro".

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