Exito del sistema experimental de recogida y reciclaje de basuras, tras un año de funcionamiento

La aplicación en Navarra del sistema de recogida selectiva de basuras podría suponer un ahorro energético anual equivalente a unas 2.000 toneladas de petróleo, según afirma un estudio elaborado por la Dirección de Obras Públicas de la Diputación Foral, de acuerdo precisamente, a las experiencias que actualmente se están llevando a cabo en este sentido en Pamplona y otras poblaciones navarras.

Uno de los elementos más importantes en el aprovechamiento de las basuras es, según este estudio, el vidrio, puesto que su consumo asciende en esta comunidad foral a más de once millones de kilogramos al año, una de las cifras más altas de España. Así, la recuperación de este producto puede alcanzar un 98%, si se hace como envase, y un 24%, si es como calcina.En Navarra, las experiencias de recogida selectiva de residuos sólidos urbanos -en principio únicamente de papel y vidriose iniciaron en abril de 1982 por varios grupos de trabajo, a los que previamente se les adjudicó esta labor. La campaña comenzó, en todas aquellas poblaciones en que se está desarrollando la experiencia, con una intensa labor informativa y de propaganda sobre el significado y forma de participar en la misma. Con esta primera fase se perseguía el objetivo fundamental de dar a conocer en qué consiste la recogida selectiva de basuras, las ventajas medioambientales y económicas que el reciclaje comporta, y la forma en que la población podría participar en una tarea de interés comunitario.

El sistema utilizado para la recogida del papel y del cartón es el llamado de puerta a puerta. Para ello, cada vecino, en un día determinado de la semana, deposita en los lugares habituales el papel y el vidrio, separados del resto de la basura; posteriormente, estos grupos de trabajo lo recogen, trasladándolo en camiones al lugar previamente elegido para almacenar tanto el vidrio como el papel. Por este sistema se han obtenido, hasta el momento, más de 8.000 kilogramos de papel en algunas zonas de Pamplona.

Recuperación y reciciaje del vidrio

Actualmente, la recuperación y reciclaje del vidrio en Ansoaín (otra población donde tiene lugar esta experiencia) se realiza utilizando un sistema de contenedores. La densidad con que se instalan es, en general, de un contenedor por cada 1.700 a 3.000 habitantes.La ventaja del contenedor sobre otros sistemas es que la recogida se realiza cada quince días y los vecinos no necesitan almacenar los vidrios usados en sus casas, con la incomodidad que esto supone, por el amplio espacio que ocupan. Por el contrario, su desventaja es el alto coste inicial y su mantenimiento.

"Los más de 23.000 kilogramos de vidrio retirados hasta el momento equivalen", según un informe elaborado por el equipo Hibaia, uno de los grupos que trabajan en esta experiencia, .una respuesta que oscila alrededor de 0,6 kilogramos por habitante y mes. Siendo la meta un kilogramo por habitante y mes, queda demostrada la aceptación de la recogida por parte, al menos, del 60% de los vecinos, y esto sin alardes ni vuelco municipal en su favor".

"Es de suponer", agrega el informe, "que una confirmación de la continuidad y de su validez, merecedora de gran apoyo y mayores esfuerzos nos hará subir fácilmente a 0,8 kilogramos por habitante y mes, techo este a partir del cual se disipan temores de pérdidas económicas". -

En esta experiencia, que comenzó hace casi un año, y que se está extendiendo paulatinamente a numerosas poblaciones de Navarra, se eligieron el vidrio y el papel para llevar a cabo este ensayo, por ser los más fáciles de distinguir, los más cómodos de seleccionar y almacenar en las casas a la espera de dejarlos en la calle para su recogida, por ser los de mayor tradición de separación para su posterior venta y, finalmente, por suponer un importante peso dentro del volumen total de basuras domésticas producidas. La recuperación del plástico no presentaba inicialmente aspectos tan favorables. -

La experiencia ha permitido demostrar que la recogida selectiva de residuos sólidos urbanos, cuya meta es conseguir progresivamente que nada de estas basuras vaya a soluciones finales duras, como la incineración y los vertederos, es un método totalmente válido ante el cual los ciudadanos responden mayoritariamente de una manera muy positiva, afirma el informe del equipo Hibaia. Dada la heterogeneidad de las poblaciones donde se desarrollan estos ensayos, se deduce que estas actividades se pueden extender a numerosas poblaciones de Navarra.

Uno de los aspectos más importantes para el éxito de la recogida selectiva de basuras lo constituyen las posibilidades de comercialización de los meteriales recuperados. En este sentido, la demanda de los materiales reciclados es cada vez mayor, tanto por la crisis económica como por la de materias primas.