El ministro de Defensa israelí, Ariel Sharon, comunicó por teléfono a Menájem Beguin su decisión de dimitir

El ministro de Defensa israelí, Ariel Sharon, ha dimitido. En una de conversación mantenida ayer por teléfono con el primer ministro, Menájem Beguin, le manifestó que estaba dispuesto a entregarle la cartera de Defensa. Según la ley, la dimisión de Sharon será efectiva a partir del lunes, 48 horas después de la formalización por escrito de esta decisión. Queda por dilucidar si Sharon continuará fomando parte del Gabinete como ministro sin cartera.

Ariel Sharon se despedirá el lunes por la mañana de los miembros del Estado Mayor israelí y de los funcionarios del Ministerio de Defensa. La decisión de Sharon constituye un repentino cambio de actitud. El jueves por la noche -tras la votación del Gobierno en la que todos los ministros, excepto el de Defensa, aceptaron en su conjunto las recomendaciones de la comisión que investigó las matanzas de Sabra y Chatila- Sharon gritó a sus colegas:. "Aquí tenéis mi cabeza. No seré yo quien la ponga bajo la cuchilla. Debéis ser vosotros los que accionéis la guillotina".

Esta frase equivalía adesafiar al primer ministro para que le destituyese oficialmente de sus funciones. Pero Beguin no le hizo. Concluida la reunión del Consejo de Ministros, el primer ministro se encerró en su oficina con Sharon. Según se asegura, fue una entrevista amistosa en la que trató de convencerle de que era mejor que se marchase con elegancia y sin provocar demasiado ruido. "Tu carrera política .no está acabada, ni mucho menos. Eres joven aún. Haz lo que debes y sigamos siendo amigos", le dijo Beguin, pero Sharon se negó a dar su brazo a torcer. El ministro de Defensa replicó a Beguin que no asistiría más a una reunión del Consejo de Ministros, "porque no quieren saber nada de mí" pero afirmó que estaba. dispuesto a asumir sus responsabilidades como ministro de Defensa hasta que Heguin decidiera destituirle.

¿Qué es lo que ocurrió, entonces, entre las once de la noche del jueves y las siete de la mañana del viernes? Ariel Sharon se dio cuenta, poco después de la decisión del Gobierno sobre las recomendaciones de la comisión investigadora, a la que quiso presentar batalla, que sus tropas no le iban a seguir. Primero en el seno del Ejército: el jefe del Estado Mayor israelí, general Rafael Eytan, a quien contaba Sharon entre sus aliados, difundió un firme comunicado en el que afirmó que el Ejército cumplirá escrupulosamente las decisiones del Gobierno. "Las Fuerzas Armadas israelíes supieron en el pasado", afirmó Eytan, "aceptar las críticas que se le dirigieron y actuar en consecuencia. También lo haremos en esta ocasión, respetando las tradiciones democráticas de nuestro país". A continuación, se dio cuenta de que el apoyo político de la fracción. parlamentaria del Likud (coalición gubernamental) que le había prometido el diputado David Magon no era suficiente para enfrentarse a Beguin. Este podía contar con una confortable mayoría.

Por eso, Sharon, como buen, estratega, creyó oportuno no entablar un combate perdido de antemano. ¿Se trata de un repliegue táctico o de una capitulación? Es díficil resolver este dilema, pero cualquiera que conozca el temperamento brillante, agresivo y tenaz del ministro de Defensa rechaza la posibilidad de que exista una capitulación. Ariel Sharon puede aceptar la propuesta de permanecer en el Gobierno como ministro sin cartera y reagrupar sus fuerzas políticas, con el propósito de utilizarlas como trampolín para la rizar una nueva ofensiva para convertirse en primer ministro o te Israel.

Existe también otra posibilidad: que Sharon abandone definitivamente el Gobierno y se lance a la vida política creando un nuevo partido de oposición, cuyo núcleo sería el grupo ultranacionalista Tehiya, que en realidad representa al Gush Emunim (Bloque de la Fe) en el Gobierno, al un sector del Partido Nacional Religioso y, naturalmente, una fracción del Heruth, el más militante dentro de Likud.

En cuanto a la sucesión de Sharon al frente del Ministero de Defensa, un grupo del partio Heruth manifestó ayer su intención de pedir a Beguin que reintegre en ese puesto a Ezer Weizman. Pero esta eventualidad parece, excluida, dadas las diflerencias entre Beguin y Weizman. Más verosimil parece que el primer ministro asuma las funciones de ministro de Defensa.

Con relación al atentado que costó la vida el jueves a Úna militante del movimiento Paz Ahora, la policía israelí retuvo durante dos horas, para interrogarle, al rabino Meir Kahana, líder de la Liga de Defensa del Pueblo Judío (extrema derecha).