La Generalitat pide al Ayuntamiento de Barcelona la cesión de tres palacios

La Generalitat de Catalunya ha comunicado al Ayuntamiento de Barcelona su interés sobre tres palacios que, a su juicio, están infrautilizados y que podrían servir para asuntos de representación, así como para alguno de los cuatro departamentos de la institución autonómica que actualmente ocupan diversos pisos.

El Consistorio barcelonés aplazó para más adelante una decisión al respecto, por considerar que pueden servir para uso de las áreas municipales en el momento en que existan partidas para ello. Entre los edificios que la Generalitat considera estimables para su uso figura el palacio de Pedralbes, otrora residencia de Franco en Barcelona. Según informó a este periódico un concejal del Ayuntamiento de Barcelona, la Generalitat estaría interesada en llegar a un convenio de utilización de algunos edificios de propiedad municipal. En particular, su representante, en una reunión entre los dos departamentos, citó el palacio de Pedralbes, el palacio Nacional y el palacete que perteneció a la Organización Nacional de Ciegos (ONCE), en la calle Ample.La fuente municipal señaló que el Consistorio entendía las necesidades de locales de la institución autonómica, pero que los tres edificios mencionados dificilmente podrían ser concedidos, por cuanto, a pesar de que su utilización no está redefinida -Pedralbes es un museo que, además, acoge exposiciones puntuales, el palacio Nacional da cobijo a los Museos de Arte de Cataluña y el de Cerámica, y el palacete de la ONCE está pendiente de asignación-, hay proyectos en marcha en los que podrían figurar. Por ejemplo, el del Museo de Cataluña, que recogería fondos de varios museos, o el del Auditorio. Aunque en el primero de los casos parece que la Casa de la Caridad será la sede de este supermuseo, por indicación de los técnicos de la Unesco, el auditorio podría situarse en el palacio Nacional.

El director general de Arquitectura y Vivienda de la Generalitat, Joan Rafols, manifestó, a preguntas de este periódico, que la institución autonómica necesita locales que dignifiquen sus departamentos, necesidad que se hace progresivamente más acuciante con la sucesión de traspasos. Y añadió: "El Ayuntamiento de Barcelona dispone de una gran cantidad de edificios. Sólo en el distrito 5 posee más de cien. Nosotros queremos llegar a acuerdos con el Consistorio para usar edificios de cierta nobleza que estén infrautilizados. El palacio de Pedralbes, el palacio Nacional o el palacete de la ONCE pueden ser interesantes y, además, podríamos mejorar sus estructuras, particularmente deterioradas en los dos primeros, incluso con goteras en sus techumbres".

En situación precaria

Joan Rafóls explica que los departamentos de Agricultura, Comercio y Turismo, Industria y Justicia están en pisos o en situación precaria de espacio. "La compra de la torre Muñoz, en el paseo de Gracia, ha solucionado el problema de la Conselleria de Finanzas. Al lado mismo está el palacio Robert, que seguramente será la residencia de huéspedes de la Generalitat. Detrás del Ayuntamiento de Barcelona, en la plaza de Sant Miquel, acabaremos el mes próximo las obras del palacio Solferino, que fue de los marqueses de Comillas, donde celebrará sus reuniones el Consell Consultiu".Al ser preguntado sobre el uso del palacio de Pedralbes, el director general señaló que incialmente se pensó como residencia de huéspedes ilustres, pero que la compra del palacio Robert elimina esta posibilidad. "Pero podría ser interesante para asuntos de representatividad", señaló.