La McDonnel califica de "maniobra política" la decisión española de evaluar el Tornado

Fuentes de la McDonnell Douglas han calificado de "maniobra política" la decisión del gobierno español de ordenar al Ejército del Aire la evaluación del cazabombardero europeo Tornado. Según la firma aeronáutica noerteamericana, fabricante del avión F-18A Hornet, el Gobierno español pretende con su decisión elevar el volumen de contraprestaciones por la compra de los 84 F-18A, cuyo precontrato o LOI (Letter of Intentions) ya fue suscrito el pasado mes de diciembre.Tales contraprestaciones, como se sabe, fueron fijadas inicialmente en 1.800 millones de dólares de 1981, frente a un volumen global de la operación de compra de los 84 aparatos de combate norteamericanos del orden de los 300.000 millones de pesetas. Para la McDonnell, la citada cifra "es prácticamente la máxima a la que se puede llegar".

Siempre según las mismas fuentes, la McDonnell podría reconsiderar alguna de las decisiones que tenía previsto adoptar a corto plazo en relación con el programa FACA (Futuro Avión de Combate y Ataque), como el establecimiento en España de varios de sus técnicos encargados de materializar las contraprestaciones ya acordadas inicialmente, en las que se encuentrari involucradas más de cien empresas españolas.

Pese a todo -han dicho las fuentes de la McDonnell Douglas-, en la dirección de la multinacional estadounidense continuan confiando en que la evaluación del avión Tornado no supondrá ningún contratiempo definitivo para sus planes, ya que están convencidos de que el F-18A es el aparato más adecuado para las necesidades planteadas por nuestro Ejército del Aire.

Finalmente, han señalado que precisamente en el seno de este Ejército ha causado un cierto malestar la decisión de evaluar el Tornado.