La CEOE propone un incremento de los salarios para 1983 entre dos y seis puntos por debajo de la inflación prevista

La Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) presentará una banda salarial del 6% al 10% en las negociaciones del acuerdo interconfederal para 1983. según afirmó ayer el propio Carlos Ferrer, presidente de la organización patronal, al término de la reunión de la junta directiva. Ello supone que los sala rios perderían un mínimo de dos puntos y un máximo de seis sobre la inflación prevista para este año, el 12%. La CEOE, según aseguraron en medios empresariales, no puede asumir el mantenimiento del poder adquisitivo de los salarios con los costes salariales que suponen la reducción de jornada y la elevación de las bases mínimas y máximas de cotización a la Seguridad Social.

La ya desvelada banda salarial que la CEOE presentará mañana en la reunión que celebrarán los sindicatos CC OO y UGT y las patronales CEPYME y CEOE recoge los criterios que la organización empresarial ha venido defendiendo prácticamente desde que se iniciaron las negociaciones entre las partes. Frente a la postura de los sindicatos de conseguir una banda salarial que garantizara el poder adquisitivo de los salarios, la CEOE ha venido insistiendo en la necesidad de que los salarios crecieran por debajo de la inflación prevista.En este sentido, José María Cuevas, secretario general de la CEOE, señaló ayer que los últimos estudios que se están manejando, incluso por el propio Gobierno, apuntan a que se produce un deslizamiento en los costes salariales en dos o tres puntos por encima del incremento pactado. Cuevas manifestó que hay tres variables en la negociación que hay que contemplar: los salarios, la Seguridad Social y la reducción de jornada. "Estas son tres facturas distintas que los empresarios tienen que pagar. No tenerlas en cuenta a la hora de establecer la banda salarial puede presentar el peligro de que los costes salariales se trasladen a precios y, consecuentemente, a un aumento de la inflación, que es precisamente lo que el Gobierno quiere evitar".

La posibilidad apuntada días atrás de que se aceptara una banda que recogiera la inflación prevista en su parte alta, dejando suficiente campo de maniobra en su parte baja, había sido rechazada por amplios sectores de la CEOE, que se remitían a la experiencia de acuerdos anteriores. Para estos sectores, los incrementos salariales siempre han ido por la parte alta de la banda, y pactar en los mismos términos que en acuerdos anteriores su pondría, finalmente, que los salarios crecerían al ritmo de la inflación prevista.

La postura de la CEOE en cuanto a banda salarial -tan lejana de la propuesta de los sindicatos, del 11%, al 13%- puede, no obstante, sufrir modificaciones a lo largo de las negociaciones. Sin embargo, si, como asegura Ferrer, está calculada de acuerdo con la jornada vigente en 1983, de seguir el razonamiento empresarial tendría que cambiarse a la baja, al no haberse contemplado en el cálculo la repercusión de la reducción de jornada ni las nuevas bases de cotización de la Seguridad Social.

Fuentes de la CEOE aseguraron ayer que la patronal no puede asumir bajo ningún concepto el mantenimiento del poder adquisitivo de los salarios, "no, al menos, en la forma que parecen entender los sindicatos. Si se produce una mayor elevación de la Seguridad Social, se podrá estar incrementando el salario social. Pero pretender incrementar el salario en efectivo en la misma proporción que la inflación es absolutamente insostenible con los sobrecostes que supone la reducción de jornada".

Banda salarial inaceptable

El anuncio de la banda salarial propuesta por la CEOE provocó ayer el rechazo rotundo por parte de los sindicatos. Para José. María Zufiaur, de UGT, "la propuesta no es de recibo. No es serio proponer que los salarios crezcan entre dos y seis puntos por debajo de la inflación prevista".

Zufiaur añadió que "es difícil pensar que se trate de una posición definitiva". En parecidos términos se pronunció Antonio Gutiérrez, de CCOO, que calificó la oferta empresarial de "casi provocación, si es que se hace absolutamente en serio". José María Zufiaur señaló, por otra parte, que en el ánimo de los empresarios está que no se puede negociar una banda salarial que no recoja la posibilidad de que los salarios crezcan al ritmo de la inflación". Abundando en la Misma idea, el portavoz de CC OO mostró su preocupación, por cuanto esta postura "puede endurecer las negociaciones". En cuanto al tema de jornada, ambos sindicalistas coincidieron en señalar que la propuesta de la patronal sobre la aplicación de la misma en 1984 la hace doblemente inaceptable.

Antonio. Gutiérrez afirmó que, a juicio de Comisiones Obreras, ha de llevarse a cabo en este mismo año, y José María Zufiaur recordó que por parte de UGT no existía una negativa cerrada a discutir el tema de jornada, siempre y cuando se aceptara que la banda salarial debía cumplir los objetivos que se habían venido defendiendo: garantizar el mantenimiento del poder adquisitivo de los salarios.

Al margen de los temas relativos a la negociación colectiva, la junta directiva de la CEOE aceptó la propuesta del comité ejecutivo para reorganizar los actuales cargos directivos de los vicepresidentes por lo que en lo sucesivo no existirá más que un solo presidente, cuyo cargo ostentará Ignacio Briones. Han cesado, como vicepresidentes, José Antonio Segurado, Pérez de Bricio, Juan Jiménez Aguilar y Arturo Gil.