Defensa del CESID
He leído en el diario de su digna dirección de fecha 1 de diciembre de 1982 la reproducción de un artículo del periódico británico The Economist titulado "Los servicios secretos y el Gobierno socialista español", en el que se critica al Centro Superior de Información de la Defensa (CESID), al mismo tiempo que se dan consejos de cómo debe estructurarse el mismo.Considero lógico que un diario británico, dentro de la libertad informativa, manifieste su posición sobre cómo debe ser y funcionar cualquier institución, que además no se encuentra dentro de su organización estatal, explicando su particular punto de vista a los lectores, pero lo que no entiendo ni medianamente es que un periódico nacional, del prestigio de todo un EL PAIS, se preste, como un simple portavoz, a reproducir injerencias extranjeras en ámbitos de nuestra soberanía, que, quiérase o no, siempre son interesadas y responden a crear dudas y vacilaciones en las personas que lo lean, cuando no animadversión, contra unos servicios que, por sus especiales características, son necesarios en cualquier país civilizado.
De ahí que, como español, tenga que manifestar mi repulsa contra la publicación de este artículo, que no ha servido nada más que para crear confusión en la opinión pública de cómo funciona el CESID, órgano que, por otro lado, hasta ahora, ha sido fundamental en la lucha contra veleidades involucionistas, además de haber sido ponderado por otros medios de comunicación de masas que no se han prestado a ser portavoces de ideas y sugerencias de otras naciones.
Espero que lo publicado por The Economist no sea, ni ligeramente, la opinión que sobre el CESID y su posible reorganización tenga el diario EL PAIS, ya que de lo contrario sería lamentable. /
