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La catástrofe de Ancona demuestra la precaria situación geológica de Italia

La catástrofe de Ancona, en la que un corrimiento de tierras ha provocado pérdidas por valor de cerca de 90 millones de pesetas, es un indicio Más del caos hidrogeológico que amenaza a Italia.

En palabras del presidente de la organización de geólogos italianos, el profesor Renzo Zia, "si no se pone en marcha u n plan urgente para salvar el suelo italiano, la península se deshará bajo nuestros pies".

Las declaraciones del profesor Zia se unen al malestar general y a la indignación que ha provocado en la opinión pública la tragedia de Ancona.

El derrumbamiento de una colina de dos kilómetros cuadrados sobre la ciudad adriática pudo haber tenido, según se sigue del análisis del profesor Zia, consecuencias menos desastrosas.

Tres son las causas que influyen, a su juicio, en el deterioro progresivo del suelo italiano: en primer lugar, su propia naturaleza, eminentemente arcillosa; en segundo lugar, las abundantes lluvias otoñales, y por último, la deforestación.

Si a las condiciones naturales del terreno se añaden una urbanización temeraria y un atrasado plan hidrológico, tenemos, viene a decir Zia, una catástrofe como la de Ancona.

La mitad de las 6.000 poblaciones italianas está amenazada con derrumbamientos parecidos.

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