El terrorismo y los servicios secretos
(...) El terrorismo rojo ha nacido de la exaltación en los años sesenta de las figuras de Mao, Ho-ChiMin, Che Guevara, interpretados como jefes de la revolución mundial armada. Las condiciones reales de Europa occidental no permitían el desencadenamiento de una guerra civil y de la insurrección comunista, auspiciada por los teóricos de los movimientos subversivos. La excesiva tolerancia de los Gobiernos democráticos con la violencia permitió el florecimiento de la conjura terrorista, alimentada con la esperanza de una relativa impunidad hasta la maduración de la revolución. Era previsible que los servicios secretos exteriores no se desinteresasen, admitiendo que no estuviesen en el origen del terrorismo. (...)El actual jefe de Estado italiano no ha instrumentalizado el problema del terrorismo con fines de política interior o exterior. (...)
(...)Queremos, y lo repetimos todavía hoy, pruebas jurídicamente válidas frente a organizaciones terroristas organizadas o ayudadas por países hostiles. El gobierno del Estado corre el peligro de reacciones equivocadas.
13 de diciembre
