Continúa la tendencia negativa

Ha terminado la semana en las bolsas españolas con lo que muchos creen que es el inicio de una nueva tendencia negativa o, lo que es lo mismo, con la continuación de la anterior.Ayer hubo más abundancia de papel que en sesiones anteriores, y éste es uno de los hechos que avalan estas opiniones, ya que la oferta ha ido aumentando día a día. Al mismo tiempo la demanda fue retrocediendo, y aunque el volumen de contratación aún se mantiene en unos niveles aceptables, el jueves había perdido 265 millones con respecto a la contratación realizada el martes, y esto sólo para el mercado de acciones.

La incertidumbre siempre cotiza a la baja, y justamente ése es el sentimiento que predomina entre los asiduos de este mercado. El presidente del Gobierno parece que no logró alejarlo, como tampoco han podido hacerlo las declaraciones de algunos empresarios sobre su esperanza en el futuro. Tal vez sea porque los inversores están esperando la llegada de los hechos concretos.

Entretanto, el mercado de valores va perdiendo gas, y ni las ampliaciones de capital de las compañías eléctricas, que tradicionalmente eran bien aceptadas, logran llamar la atención de los propietarios del dinero. Y no es de extrañar, ya que al actual precio de los cupones, las acciones nuevas salen más caras que las viejas, y si la rentabilidad de las acciones antiguas ha quedado en entredicho ante la anunciada posibilidad de disminución de dividendos, de las nuevas apenas se quiere oír hablar.

En estas condiciones, no es de extrañar en absoluto que el indicador sectorial de las eléctricas haya perdido en la semana 2,66 puntos. Ayer el grupo siguió siendo castigado y perdió un punto en Madrid, con lo que la incógnita de su futuro se agranda un poco más.

El grupo de los grandes bancos también aumentó ayer el papel a la venta, aunque el volumen del saldo de las operaciones por caja sigue sin ser grande. Sólo el Popular y el Vizcaya vieron reducidos sus saldos y junto con el Bilbao, fueron los que repitieron cambio. El resto de ellos cedió desde un punto el Hispano y el Santander, dos Banesto y cuatro el Central,que vio aumentar su saldo particular de 3.000 a 28.000 títulos.

En alimentación sigue manténiendose la pujanza del grupo Azucarera y Ebro, mientras el resto de los valores que lo integran mantiene una postura más débil. Quizá sea debido a que estos valores no han tenido un ejercicio tan bueno como las compañías azucareras.

Del resto de los, valores del mercado no hay mucho que decir, salvo que se suman a la corriente general sin oponer apenas resistencia.

La Bolsa de Barcelona fue la que sufrió las pérdidas más fuertes en la jornada de ayer, 0,89 puntos en el indicador general, siendo los grupos más perjudicados los de eléctricas, constructoras, químicas y siderúrgicas. En este mercado el volumen de contratación se redujo más drásticarnente aún que en el madrileño, al pasar del martes al jueves a ser bastante menos de la mitad.

Como resumen, sólo queda añadir que el mercado presenta todos los factores necesarios, aunque no sean los suficientes, para poder empezar a hablar de la formación de una tendencia a la baja. Pero la contratación, aunque reduciéndose día a día, indica que en el mercado de valores aún hay quien piensa que esto no es así.