Los empresarios de Navarra, dispuestos a afrontar solidariamente las amenazas de ETA

"Estamos convencidos de que hay que afrontar las amenazas de ETA entre todos, con valor y solidaridad", según afirma Javier Erro, nuevo presidente de la Asociación de la Pequeña y Mediana Empresa del Metal de Navarra (APMEN), en unas declaraciones realizadas a Diario de Navarra.

Las manifestaciones de Javier Erro se producen días después de que APMEN hiciese público un comunicado oficial en el que se denunciaba que empresarios navarros estaban siendo objeto de amenazas y peticiones del impuesto revolucionario -en cantidades que oscilan entre los dos y diez millones de pesetas- por parte de ETA. Estas peticiones, según pudo saber ayer EL PAIS, se intensificaron el pasado mes de octubre.La actitud del comité ejecutivo de APMEN de denunciar a la opinión pública la extorsión a que se encuentran sometidos algunos empresarios se desencadenó tras conocerse oficialmente la situación de varios casos y pocas horas después de que presuntamente se intentara el secuestro de uno de los empresarios navarros amenazados, cuya identidad no ha sido revelada.

"Al tener conocimiento oficial de que había asociados amenazados con el impuesto revolucionario", dice el nuevo presidente de la Asociación de la Pequeña y Mediana Empresa del Metal en Navarra, "decidimos exponer la verdad a la opinión pública de unos hechos que, por desgracia, ocurren en la sociedad navarra. Como comité ejecutivo y como personas tenemos la obligación de ayudarles, aunque sea moralmente".

"Estamos convencidos", agrega, "de que hay que afrontar el problema de ETA con valor. Es algo real que estamos padeciendo. Un problema común y personal que hay que tratar con cuidado y solidaridad. Con nuestra postura iremos creando asociacionismo y confianza para que se denuncien estos casos".

Javier Erro, presidente de APMEN, asociación esta que agrupa a más de 150 pequeños y medianos empresarios del metal de Navarra, asegura en sus declaraciones que los titulares de empresas amenazados son cada vez más decididos y comunican su situación. "Se dan cuenta que hay una recepción en la asociación y un apoyo que, quizá individualmente, no podría obtener de forma tan eficaz". Afirma también que se han adoptado medidas de seguridad de carácter preventivo. "Los empresarios amenazados no saben lo que hacer, y a través de la asociación hemos abierto los cauces para un acceso directo y operativo en el contacto con la policía".

El presidente de APMEN concluye señalando que no se puede medir a todos los empresarios por el mismo rasero. "Nos prometen ayudas que nunca llegan y nos falta el apoyo moral de la sociedad, que desconoce nuestra difícil situación".