Contra el riesgo de cáncer e infarto, reduir grasas

Una alimentación adecuada para prevenir el riesgo de infarto, o cancer, ha de limitar el consumo de grasas a un 30%, como máximo y procurar buenas cantidades de frutas y legumbres. Esta es la tésis fundamental que ha defendido el doctor aleman de la universidad de Heidelberg, profesor Guenter Schilierf, en un congreso que sobre 'Alimentación y cancer' tiene lugar en Hamburgo (RFA), según informa EFE.Reducir la cantidad específica de comida, no consumir o, al menos, reducir la cantidad de alimentos salados, ahumados o asados, son líneas fundamentales para conseguir una dieta equilibrada y sana que no haga trabajar demasiado a los órganos de la digestión y mantenga el cuerpo en forma para defenderse, tanto del cancer, como contra el ataque cardiaco. Las frutas y verduras -añade el médico alemán- aportan vitaminas y crean defensas contra gran número de enfermedades menores. La recomendación señala que estos alimentos han de tomarse en buenas cantidades que aportan vitaminas básicas al cuerpo.