La CGT exige explicaciones al Gobierno argentino sobre los desaparecidos
La Confederación General de Trabajadores de Argentina (CGT) y 62 organizaciones peronistas de este país exigieron ayer al régimen castrense de Buenos Aires el esclarecimiento de la suerte de las miles de personas que desaparecieron en este país a raíz de la represión desatada por el golpe militar de marzo de 1976.En cuanto a los cuatrocientos cadáveres hallados recientemente en el cementerio de General Sarmiento, del suburbio Gran Bourg de la localidad de San Miguel, en la provincia de Buenos Aires, las organizaciones mencionadas subrayaron la "imperiosa necesidad del esclarecimiento del problema de los desaparecidos, acción que corresponde al Gobierno militar, por la responsabilidad que en esta cuestión le compete".
En una conferencia de Prensa conjunta convocada ayer por la Confederación General de Trabajadores y 62 organizaciones peronistas dirigidas por Lorenzo Miguel, las organizaciones convocantes anunciaron que si a mediados del próximo mes de noviembre no han obtenido respuesta del Gobierno de Buenos Aires sobre los temas planteados, se organizará una nueva medida de "acción directa".
El secretario general de la central sindical, Saúl Ubaldini, subrayó en la conferencia de Prensa que el memorial presentado por la CGT al Gobierno el 2 de julio, simultáneamente a las movilizaciones de esta central no han hallado respuesta hasta el momento.
En un comunicado difundido ayer por las organizaciones citadas, éstas mostraron la preocupación creciente de los trabajadores argentinos por la caída del salario real y el incremento de la inflación, la desocupación y el subempleo, así como por la situación de los jubilados y pensionistas, que calificaron de "gravísima".
Del mismo modo, las organizaciones sindicales se pronunciaron contra la presencia en Argentina del general boliviano Luis García Meza, que se nombró presidente del país altiplano tras protagonizar un golpe militar cruento contra el régimen constitucional de Lidia Gueiler, en julio de 1981. Posteriormente, el general golpista se asiló en Argentina.
También criticó la presencia en Buenos Aires del coronel boliviano Luis Arce Gómez, ministro del Interior del régimen dictatorial de García Meza. Arce Gómez, asilado también en Argentina, reconoció ayer en Buenos Aires su responsabilidad en el asesinato del dirigente socialista boliviano Marcelo Quiroga Santa Cruz.
