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Betancur: "Colombia no tiene tiempo para atender las extravagancias de la FlFA"

En un discurso de 99 palabras, el presidente de Colombia, Belisario Betancur, anunció oficialmente la renuncia de su país a organizar el próximo Campeonato Mundial de Fútbol, cuya celebración está prevista para 1986. "Aquí en el país", dijo Betancur, "tenemos muchas cosas que hacer y no hay tiempo para atender las extravagancias de la FIFA y sus socios". Colombia se convierte en el primer país que declina una oferta de sede. El presidente de la FIFA ha anunciado que la nueva sede se dará a conocer el 18 de mayo.

La renuncia anunciada de Colombia para organizar el Mundial-86 se hizo por fin oficial el pasado lunes por la noche (madrugada del martes en España). Belisario Betancur expresó el rechazo a la organización del máximo acontecimiento futbolístico, argumentando la imposibilidad de atender las exigencias que puso la FIFA. Para el máximo mandatario colombiano el pliego de cargos impuesto por el organismo futbolístico incumplía la regla de oro: "El Mundial debía servir a Colombia, y no Colombia a la multinacional del Mundial", así lo manifestó Betancur en su discurso al país, transmitido por la radio y televisión, y con el que se ha mostrado solidario la gran mayoría del pueblo colombiano.La candidatura de Colombia, obtenida en 1974, año en el que resultó elegido el brasileño Joao Havelange como presidente de la FIFA, corrió toda clase de vicisitudes. Ya en el Mundial de España se vio que la demora colombiana en manifestarse sobre la aceptación de su candidatura había creado inquietud en los medios oficiales de la FIFA.

Un cuaderno de cargos enviado direptamente desde Zurich por la FIFA a la Federación Colombiana precipitó el desenlace. Las exigencias solicitadas por la FIFA rompían todas las posibilidades de organización que se habían creado los colombianos. La FIFA, por mediación de Hermann Neuberger, primer interesado en cambiar de sede al Mundial-86, puso a Alfonso Senior, padre de la idea, y a Colombia, contra la pared.

En dicho cuaderno de cargos se exigía la celebración del Mundial con 24 equipos y en 12 sedes. Colombia argumenta que cuando pidió el Mundial, el campeonato lo disputaban 16 equipos y el torneo no era tan suntuoso. La FIFA también exigía la construcción de estadios con capacidad para 40.000 espectadores para la primera fase; 60.000 para la segunda y 80.000 pasa la inauguración y fase final. Se exigía la modernización de la iluminación en algunos estadios.

Los colombianos respondieron que todos los partidos se iban a jugar de día. Todas las ciudades sedes tenían que tener aeropuerto, que cumpliera las normas IATA y ademas estar enlazadas por una red (le ferrocarriles y carreteras. Esta petición hizo declarar a un dirigente colombiano que "los directivos de la FIFA no parecen haber visto un mapa de Colombia en su vida". El relieve colombiano hace imposible la comunicación por ferrocarril. Los precios de los hoteles se tenían que congelar desde enero de 1986. Los impuestos sobre las entradas no podían superar el 15%. Las comisiones para las agencias encargadas de vender entradas tendrían que ser menores del 10%. Estas últimas exigencias fueron calificadas como intento de violación de la soberainía colombiana.

Condiciones inaceptables

El pleno de cargos vino a destruir prácticamente la iniciativa de la empresa privada, que a través de la Corporación Colombia-86 pensaba hacerse cargo de la financiación del Mundial. Las condiciones eran imposibles para los colombianos. Las necesidades locales de orden económico, social y deportivo colocaban a la Copa del Mundo de fútbol en un orden secundario. El presidente Belisario Betancur ya había dado el primer aviso en plena campaña electoral: "Ni un sólo centavo del presupuesto nacional para el Mundial de Fútbol". Para Colombia acabó la espera. Sin embargo, como dijo Betancur, el Premio Nobel de Literatura de García Márquez "compensa al país de lo que puede perder en imagen durante la celebración de un Mundial de fútbol.

La FIFA no tomará ninguna decisión en torno a la sede del Mundial-86 hasta que no reciba la comunicación oficial de la renuncia de Colombia. A continuación solicitará las candidaturas de los países que estén interesados y que deberán adjuntar un acta de obligaciones y garantías mínimas para asegurar un desarrollo correcto de la Copa del Mundo. El Comité Ejecutivo de la FIFA no decidirá 18 de diciembre, la nueva sede, posponiendo esta decisión hasta el 18 de mayo en su reunión de Estocolmo.

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