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La autonomía no ha cambiado nada en la Rioja

"Lo único que ha cambiado en la Rioja con la autonomía es que antes llamabas a la, diputación y una señorita te decía: "Aquí la Diputación de Logroño, ¿dígame?" Y ahora te contestan: "Aquí la comunidad autónoma, ¿dígame?" Esa es en la práctica la única dife rencía hasta el momento, afirma Rafael Fernández Aldama, una de las personas que con mayor entusiasmo intentó tanto explicar a nivel popular lo que era la autonomía a sus paisanos, como perseguir una recuperación de una cultura autóctona. Para mayor inri, ambas instituciones ocupan ahora el mismo edificio que antes tenía la Diputación, con lo que la confusión es todavía inayor.Todas las personas consultadas coinciden en un punto vital: la Ríoja se encuentra en una encrucijada. Una encrucijada de caminos que históricamente fue campo de batalla -y también de encuentro de distintos pueblos y culturas, según Luis Javier Rodríguez Moroy, presidente del Gobierno autónomo-. Una zona de paso, un istmo orientado a los cuatro puntos cardinales: País Vasco y Navarra, por un lado; Aragón, por otro, y Castilla. Ello es perceptible en los propios quioscos de Prensa: El Correo Español, La Gaceta del Norte y hasta Egin se llevan la palma de lectura junto a los diarios nacionales madrileños, y no falta algún periódico aragonés, aunque es más infrecuente. El diario local tiene escaso predicamento.

Para el presidente de la Diputación General de la Rioja, Domingo Alvarez y Ruiz de Viñaspre, la Rioja está sometida a unas fuerzas centrífugas muy grandes: "Los de la parte de Haro van a Bilbao. Aquí se dice ¿qué es una persona de Haro?: un bilbaíno con cien pesetas menos en el bolsillo... Los de Calahorra tiran más hacia Navarra y Logroño, y la parte de Cervera tira hacia Soria. Y, mire usted, el propio mercado de Vitoria baja hasta la misma capital, Logroño".

¿Burgos? Aquí a la parte burgalesa que se adentra camino de Alava y Logroño le denominan la Riojilla. Burgos no existe. Y Soria queda muy lejos separada por altos puertos y montañas cerrados casi todo el invierno, aunque al dar las horas el carillón de la caja haga sonar la canción Ya se van los pastores a la Extremadura. Eso es porque antes en la zona serrana de Los Cameros había mucho bosque y ganadería, allí en las altas sierras que lindan con Soria, pero eso no es lo que.se entiende por la Rioja. Para Rafael Fernández Aldarna -como para los demás consultados-, la repartición de España hecha por Javier de Burgos en 1833 hizo que, por un lado, se metieran en la Rioja zonas castellanas, y por otro, que la Rioja esté desmembrada (hay una Rioja alavesa, otra navarra y otra, valga la redundancia, riojana, y hasta la Riojilla de Burgos).

A estas opiniones puede añadirse la de Alfredo Gil del Río, hístoriador: "De Castilla siempre nos ha separado la vida real, no hay identidad cultural ni la vida en común que precila un pueblo. Aragón tiene una conciencia histórica propia y muy diferente a la nuestra, aunque nos una el Ebro y hasta en Logroño se celebre de cuando en cuando el día de las jotas de la ribera del Ebro. Queda la unión de la Navarra de Pamplona para abajo".

"No tenemos una cultura autóctona. Se habla mucho de Gonzalo de Berceo y de aquí, en San Millán se escribieron las primeras crónicas en castellano, pero también lo fueron a la vez en eusquera".

ETA y Euskadi

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Casi la misma unanimidad la encontramos tanto en estas personas como, dentro del mundo económico, en Víctor F. Aldama, director de la Caja Provincial. "La autopista del Ebro y las que parten hacia Navarra y Euskadi nos han vuelto a convertir en cruce de caminos. Nos ha acercado aún más a Euskadi, que siempre tiró mucho de nosotros y ahora se ha abierto el rápido camino a Cataluña y Aragón". Para el presidente de la Diputación, "si no hubiera existido ETA y sus consecuencias, acaso el mapa autonómico hubiera variado, ya que queramos o no estamos dentro de su área de influencia".

El periodista Arturo Cenzano opina, no obstante, que la Rioja es complementaria de Euskadi, "pero la etnia y el tema euskaldún, junto a que cada vez la importancia económica de Euskadi decrece, le ha restado importancia e influjo". "No hace muchos años que Gonzalo Sáenz y también Tamames preconizaron esa región vasco-navarro-riojana", nos señala Fernández Aldama; "el terrorismo de ETA ha impedido que lleguemos a acuerdos".

"En resumen -y al respecto hay también unanimidad entre los consultados-, la Rioja, que nunca fue autonomista, vio cómo todos se constituían en comunidades y llegamos a nuestra autonomía por exclusión y por autodefensa. La prueba es que cuando ha habido manifestaciones, la respuesta popular ha sido mínima".

Hasta el tema de elección de una bandera inventada fue un proceso singular. La Diputación convocó un concurso público, pero un grupo -del que formaba parte Fernández Aldama (otros dicen que el invento fue del cronista de la Rioja, el cura Felipe Abad, de Arnedo)- salió y se impuso la morada (del vino), blanca (de pureza de paisaje), verde (de la ribera) y amarilla (de las tierras no regadas). Quién sabe. "Una bandera con tantos colores es como si fuera africana", nos dicen.

Salida en la hornada autonómica del último Consejo de Ministros de Calvo Sotelo, nada funciona, y así lo reconoce tanto el presidente de la Diputación General como el presidente del Gobierno autonómico, y Jesús L. Araquistain, arquitecto del Ayuntamiento. La descomposición de UCD ha sido en la Rioja terrible. De una asamblea con 32 miembros, veintidós eran de UCD. Restan seis. Uno, al PAD; once, al CDS, etcétera.

La Rioja como pueblo rico en agricultura y con una cierta industria es conservadora. Pero nadie se atreve a aventurar un pronóstico cara el 28-O. Tal ha sido aquí el desastre y la ruina de UCD. Acaso entre AP y el partido de Alzaga alcancen la mayoría.

Para Rafael Fernández Aldama no existe una cultura autóctona riojana, y recuperar viejas tradiciones, casi todas folklóricas, es difícil, dada la falta de apoyo. "Es más, en los pueblos, y yo los he recorrido casi uno a uno, nadie se presenta la necesidad de esa recuperación". Para el consejero de Cultura, la cultura autóctona es casi inexistente; "lo que sí ha habido es una pequeña. recuperación, pero sin apoyos no vamos camino de nada. Tenemos acaso juegos florales y poco más", dice Romanos. 'No hay literatura riojana, ni existen locales teatrales".

La Rioja es la autonomía más pequeña y con menor número de habitantes. "Es difícilmente gobernable", según Moroy. Región, en claro aumento progresilta tanto por su aportación al PIB nacional como por su renta per cápita. Según el director de la Caja Provincial, "tenemos una base agrícola muy rica y muy variada, una industria agroalimentaria en claro auge y una industria parecida a la del País Valenciano. Así, el calzado en Arnedo, la madera en Nájera, el caucho, la máquina herramienta, etcétera, sin olvidar las artes gráficas que trabajan para Vitoria. Lo que tenemos es que descentralizar la línea del Ebro y potenciar la zona pastoril y de bosques de Los Cameros".

Región estable

"La ioja es estable, conservadora, de gente alegre y que vive bien. No somos ricos, pero el campesinado es ahorrador. Creo que aquí puede funcionar bien la autonomía", indica el presidente del Gobierno autónomo.

La Rieja es un centro repartidor de flujos, intercambios y comunicaciones entre las cuatro áreas que la rodean: Vitoria, Pamplona, Zaragoza y Burgos, y en menor medida la desértica Soria. "Sí por las actuales circunstancias políticas de Euskadi la Rioja no se articula de alguna forma con el Norte, puede correr peligro de cierta asfixia, ya que la región, por su pequeña extensión y el natural mercado de sus productos naturales, es un istmo entre las regiones citadas".

La Rioja en la encrucijada de todos los caminos.

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