19 años de espera para la segunda amazona cosmica

Por segunda vez en la historia de la cosmonáutica, una mujer soviética, as mundial del deporte aéreo, navega por el espacio cósmico. El hecho se produce diecinueve años después de que la primera cosmonauta de la historia, Valentina Tereshkova, pronunciara desde la nave espacial sus famosas palabras: "Yo, gaviota".La nueva cosmonauta, Svetlana Savitskaya, de 34 años, que forma parte de la tripulación de la nave Soiuz T7, lanzada el jueves al espacio, reúne todos los requisitos para la difícil misión que debe ralizar. Posee dieciocho récord mundiales de aviación y en 1970 fue campeona mundial de acrobacia aérea. Se trata de "una mujer menuda, con flequillo infantil sobre unos ojos castaños y un poco soñadores", según la descripción publicada en la Prensa soviética. Antes de terminar el bachillerato había decidido convertirse en aviadora.

El programa de vuelo de la Soyuz T7 incluye, además del ensamblaje con el complejo orbital Salyut 7, experimentos científicos de carácter astro-fisico y técnico, así como un programa de observaciones de la superficie terrestre y toma de fotografías.

A los diecisiete años, Svetlana Savitskaya estableció tres récord mundiales de salto en paracaídas desde la estratosfera, y a los diecinueve conquistó el título de maestra de deporte de la URSS por sus éxitos en el pilotaje de aviones. La heroína soviética del cosmos no es una desconocida para la Prensa internacional, aunque hacía tiempo que no se la recordaba.

En 1970, un periódico británico la llamó Miss Sensación y publicó su foto destacada, con motivo de las competiciones mundiales de acrobacia que se celebraron en el Reino Unido aquel año. La estudiante del Instituto de Ingenieros Aeronáuticos de Moscú que era entonces Svetlana, alcanzó el mejor resultado y se alzó con el título de campeona del mundo en esa difícil especialidad deportiva.

El título de Miss Sensación fue refrendado por la joven campeona con nuevos éxitos en el arriesgado oficio del manejo de aviones, puesto que en 1974, en un reactor supersónico, batió ocho récord mundiales de ascensión rápida. No pararon ahí las hazañas de la Savitskaya. Un año después, en un avión E-133, consiguió alcanzar, en un trayecto entre los quiiice y los veinticinco kilómetros, una velocidad media superior a los 2.363 kilómetros por hora, dos veces y media la velocidad del sonido.

El lanzamiento de la segunda mujer cosmoaauta al espacio ha sido rodeado, de un secreto total en la URSS y ha constituido una sorpresa para todo el mundo, aunque era sabido que había mujeres preparándose en el centro de entrenamiento espacial Yuri Gagarin, en las cercanías de Moscú.

Los problemas suscitados a raiz de vuelo espacial de Valentilna Tereshkova, en 1963 -decían algunos- podían estar rélacionados con ciertos trastomos fisiológicos, que debían ser estudiados cuidadosamente para no poner en peligro la herencia genética.

Las fuentes oficiales soviéticas han sído herméticas al respecto y, en realidad, se ignoran exactamente las causas de este retraso femenino en la exploración cósmica.

Con el lanzamiento espacial de Svetiana Savitskaya, los soviéticos parecen haber resuelto el problema, ya que uno de los factores determinantes de estos vuelos es la seguridad de los cosmonautas, y si hubiesen existido dudas, Miss Sensación estaría ahora probablemente en la Tierra.