El Encuentro de Compositores de Mallorca promocionó a autores no consagrados

, El III Encuentro de Compositores de Mallorca, certamen de música contemporánea dedicado a dar a conocer y promocionar la obra de compositores nacionales y extranjeros no consagrados, se ha celebrado en Palma la pasada semana, bajo la coordinación y organización del compositor mallorquín Antonio Caimari y patrocinado por el Ayuntamiento, el Consejo Insular de Mallorca y otras entidades locales.

Las tres sesiones de conciertos que formaron el certamen estuvieron dedicadas, cada una de ellas, al menorquín Llorenç Calmés, los austriacos Silvia Sommer y Meinhard Rudenaüer, y el catalán Benet Casablanca. Llorenç Calmés abrió este III Encuentro con unas obras pianísticas, corales y de lieders (canciones líricas), interpretadas, además de por el propio autor, al piano, por la Capella Oratoniana, dirigida por Gori Marcus; Raimond Boix, violín; Felita Cantallóps, mezzo soprano; Margarita Palou, piano, y María José Martorell, soprano lírica.La obra del menorquín Galmés, explicada por él mismo antes de su audición, como es habitual en cada sesión del certamen, camina entre las canciones líricas, con letras de poetas de su tierra, y las canciones populares menorquinas, armonizando los coros con la música de cámara.

Por primera vez, el encuentro programó una sesión dedicada a la obra de compositores extranjeros; en este caso a los austriacos Silvia Sommer y Meinhard Rudenaüer. Silvia Sommer, compositora y pianista, estrenó en Palma su Trío para flauta, guitarra y contrabajo, obra compuesta en 1977, además de una Sonatina para flauta y piano; La vida de Cadacanto, compuesta expresamente para el Encuentro de Mallorca de este año, basada en un poema de Rafael Alberti; los Fragmentos, también estrenada en Palma aunque compuesta a petición de la pianista Rosario Marciano para un concierto en la sede de la ONU en Viena; y la canción Un gigante frente a la ciudad, testimonio antinuclear de la consulta realizada en Viena, en 1978, en contra de la instalación de un reactor nuclear en la ciudad.

Meinhard Rudenaüer, en la segunda parte de la misma sesión, presentó Otras danzas, trío para piano, violonchelo y clarinete; Máscaras, Tres valses, y Cassazione serena, para piano solo las tres, ejecutadas por Luis Avedaño (piano), Miguel Bagó (clarinete), Jordi Ventura (violonchelo), Markus Hinterhanser (Ipiano) y Rosario Marciano (piano).

Música de cámara de 'ballet'

El grueso de la obra de Rudenaüer gira alrededor de la música de cámara de ballet, siguiendo la tradición de la Escuela Clásica Vienesa, como toda la generación de compositores austriacos de las últimas décadas. En Máscaras, obra también estrenada en este Encuentro junto con Cassazione serena, se demuestra esta evolución.Por último, Benet Casablancas, a sus 26 años, ya compositor con un amplísimo curriculum internacional, se ha traído a Palma su música "que es el silencio del que surge y el silencio en el que muere... Estas estructuras que proyectan su plenitud expresiva en los silencios de la ambigüedad", según palabras del propio autor.