La ley Antiterrorista

Las que conocemos a Ana Ereño, recientemente detenida, sabemos de una vida dedicada a la defensa de las mujeres, a la construcción de esa utopía que es un mundo sin violencia, sin agresiones, donde las mujeres tengamos un hueco digno para vivir.Precisamente esta utopía nos da legitimidad a las mujeres para levantar la voz contra la tortura, el método más envilecedor y degradante de la persona humana. Por esto denunciamos con todas nuestras fuerzas los golpes, los interrogatorios, los diez días en comisaría que Ana ha sufrido. Aquí nos un¡mos a la querella criminal que su familia ha presentado, porque ya es hora de exigir responsabilidades.

El que la tortura exista y se practique sistemáticamente es debido a la aprobación por el Parlamento español de la ley Antiterrorista, que permite a la policía total impunidad en su trato a las/os detenidas/os.

En su día se nos dijo, pero no se nos convenció, que esta ley iba a ser aplicada en casos excepcionales. Aun estando absolutamente en contra de que se aplique a nadie, la práctica nos está demostrando que, por lo menos en Euskadi, la inmensa mayoría de las/os detenidas/os padecen en sus cuerpos esta ley (cientos de denuncias por torturas ... ).

El caso de Ana nos hace pensar que al amparo de esta ley se intenta golpear no sólo a aquellos a los que, en teoría, va destinada, sino a movimientos populares como el movimiento feminista, ya que durante los diez días ha sido continuamente interrogada sobre las actividades de las feministas en Euskadi.

Hemos podido observar ciertas contradicciones en la información Pasa a la página 14 Viene de la página 13 que se ha dado sobre Ana. Ella no fue detenida en Madrid con un pláno de la central telefónica. Ella fue detenida en su casa de San Sebastián, en su pueblo y entre sus gentes.

Se nos ocurre que lo único que pretenden es hacer más verosímil la acusación de participación en una acción que ella no ha reconocido a pesar de las torturas.

Exigimos la libertad inmediata de Ana Ereño. El cese de las torturas y la derogación de la ley Antiterrorista./ , por la Asamblea de Mujeres de Vizcaya.