Koivisto quiere tranquilizar a Breznev.
El secretario general del Partido Comunista de la Unión Soviética, Leónidas Breznev (a la derecha) recibió ayer al nuevo presidente finlandés, Mauno Koivisto, en el aeropuerto de Moscú. El hecho de que el primer viaje de Koivisto como presidente haya sido a la capital soviética, y no a Estocolmo, como podría haberse supuesto, ha originado numerosos comentarios en los círculos occidentales de Moscú. Se dice que Koivisto trata de tranquilizar al Kremlin, que no era el favorito de los dirigentes de la URSS para la sucesión de su predecesor, Urho Kekkonen.
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