UTECO y otras tres cooperativas recibieron créditos baratos de la Caja Rural de Santander

La Unión Territorial de Cooperativas del Campo de Santander (UTECO) y tres cooperativas ganaderas de Cantabria que tienen en común la mayor parte de sus directivos, entre los que se encuentran el director general, el presidente y varios consejeros de la Caja Rural de Santander, reúnen créditos, concedidos por ésta, por importe de seiscientos millones de pesetas. El bajo interés con el que están concedidos, el hecho de que la mayoría se encuentren vencidos, así como la irregular situación legal de algunas de las cooperativas citadas, son una parte de las denuncias presentadas por el diputado socialdemócrata Ciriaco Díaz Porras, en la interpelación formulada al Gobierno en torno a la situación de la Caja Rural de Santander.

La UTECO que, de acuerdo con un decreto del Ministerio de Hacienda de 1978, debería haberse convertido en una cooperativa de segundo grado, carece desde hace tres años de presidente y consejo rector, siendo el gerente de la entidad el director general de la caja rural, Tomás Mier.A pesar de lo establecido por la ley, la UTECO de Santander no se ha disuelto ni se ha transformado en cooperativa de segundo grado, y, sin embargo, no se han realizado asambleas generales, como es preceptivo, en todas las cooperativas socias de la entidad. La mayoría de éstas presentó el 27 de octubre de 1981 una denuncia ante el Ministerio de Trabajo y la Dirección General de Cooperativas, solicitando se diera cumplimiento a la ley en cuanto a la realización interna de la cooperativa.

Igualmente se presentó denuncia ante el delegado de Trabajo y la inspección de este ministerio en Cantabria sin que, según recoge la interpelación de Díaz Porras, se haya recibido notificación en torno a sus resultados.

Irregularidades cometidas en UTECO

No obstante, a juicio del diputado interpelante, estos quebrantamientos de forma son sólo una parte "y no la más importante" de las irregularidades cometidas en la UTECO.Díaz Porras, señala en su interpelación al Gobierno como desde hace dos años en las instalaciones de la citada entidad cooperativa se están realizando operaciones a nombre de la Cooperativa Provincial de Suministros Ganaderos (COSUGA) y de la cooperativa agrícola de Santander, ambas inexistentes de acuerdo con la certificación expedida por la Dirección General de Cooperativas, dependiente del Ministerio de Trabajo, de junio de 1981.

La situación de COSUGA es, de acuerdo con el informe del parlamentario Díaz Porras, especialmente reveladora de las relaciones existentes entre ésta, la caja rural y UTECO.

Así, el presidente de COSUGA, Tomás Mier, es el director general de la caja rural y, a su vez, gerente de UTECO, en tanto que el secretario de la primera, Amós Fernández, es el presidente de la caja rural y, además, secretario de una de las tres cooperativas asociadas en COSUGA: la de Viveda-Queveda, la de Ajo-Bareyo, sin actividad desde hace siete años y en proceso contra Tomás Mier por presunta estafa y falsificación de talones bancarios, y la cooperativa agrícola de Santander, presidida por el consejero de la caja rural, y conocido constructor, José Antonio de la Llama Vázquez, que también encabeza la cooperativa del Campo de Santander y la cooperativa Agrícola Ganadera y Forestal.

Por otra parte, tal como denuncia el pliego de cargos presentado por el Banco de España contra la dirección de la caja rural, ésta transfirió a COSUGA un inmueble, propiedad de esa entidad bancaria, valorado en más de 105 millones de pesetas, sin que dicho acuerdo fuese adoptado, como establece la ley, por la asamblea general de la caja.

Relación de créditos concedidos

La relación de créditos concedidos por ésta a las cooperativas citadas, y cuyo interés oscila entre el 9,5% y el 12% -los concedidos a ganaderos no superan en ningún caso las 100.000 pesetas con un interés de un 17,5%- es la siguiente: UTECO, 245 millones de pesetas, repartidos en tres créditos, dos de los cuales se encuentran vencidos, uno desde diciembre de 1977; COSUGA, cien millones de pesetas; Cooperativa del Campo de Santander, 115 millones de pesetas en dos créditos que se encuentran vencidos; Cooperativa Agrícola y Forestal de Santander, cien millones de pesetas.El diputado Ciriaco Díaz Porras, de Acción Democrática, autor de la interpelación citada y que finaliza con diecisiete preguntas relacionadas con la irregular situación de la caja rural, tienen pendiente una querella por injurias, presentada por Justo de las Cuevas, quien solicita quince millones de pesetas de indemnización.

En el texto de la querella, Justo de las Cuevas niega, una vez más, sus relaciones con la caja rural, de las que se hizo eco Ciriaco Díaz Porras, basándose en los numerosos documentos públicos que demuestran lo contrario, en el transcurso de la constitución de la asamblea regional de Cantabria en el pasado mes de febrero.