Los religiosos de la enseñanza exigen de nuevo la ley de financiación

La ley de Financiación de la Enseñanza Obligatoria, la reafirmación en el ideario particular y la participación de los seglares en el funcionamiento de los centros religiosos han sido los puntos subrayados por la Federación Española de Religiosos de la Enseñanza (FERE) en la conferencia de Prensa consiguiente a su asamblea general, celebrada el pasado fin de semana.El ministro de Educación, que se mostró de acuerdo con la FERE en el primado a la libertad de enseñanza -"hay que partir de la libertad para llegar a la igualdad", decía-, anunció la decisión del Gobierno de tramitar cuanto antes la ley de Financiación Obligatoria, "ya que sería arriesgado posponer la ley para después de la actual legislatura".

A la citada asamblea general asistió toda la plana mayor de la Iglesia española: el presidente de la Conferencia Episcopal, Díaz Merchán; el presidente de la comisión de enseñanza, Elías Yanes, y el nuncio, Antonio Inocenti, recalcando todos la importancia de la enseñanza para la transmisión de la fe.

En el comunicado final de la FERE, que dice representar a 3.500 colegios regentados por religiosos españoles, con 75.000 profesores y unos dos millones de alumnos, se dice «que la equidad y justicia que la FERE reclama en la ley de Financiación supone que los padres de familia puedan ejercer el derecho que tienen a elegir para sus hijos el tipo de educación más conforme a sus convicciones, sin que ello implique discriminación económica».

Los responsables de la Federación de Religiosos de la Enseñanza insistieron en lo que les parece esencial: «Nos interesa que se subraye que el titular que va a ser subvencionado con la ley de Financiación es el alumno o su familia y no los centros».

La asamblea aprobó un plan de acción para 1982 "en consonancia con los objetivos propuestos por la Comisión Episcopal de Enseñanza" y que centra su atención en el viaje del Papa a España y el centenario de santa Teresa.