Haig reitera en Rumanía su deseo de seguir dialogando con el Este
La breve visita que ayer realizó a Rumanía el secretario de Estado norteamericano, Alexander Haig, ilustra la voluntad de Washington de mantener, a pesar de la crisis polaca, el diálogo abierto con los países del Este europeo "que estén dispuestos a ello".Estados Unidos y Rumanía mantienen opiniones divergentes en torno al problema polaco, según declaró Haig tras conversar durante cuatro horas, "franca y cordialmente", con el presidente Nicolae Ceaucescu. En la entrevista estuvo, asimismo, el ministro de Asuntos Exteriores rumano, Stefan Andrei.
Haig llegó en la noche del jueves a la capital rumana, procedente de Marruecos, Portugal y España. En el aeropuerto elogió la independencia de la política exterior de Bucarest y criticó, indirectamente, la injerencia soviética en los asuntos internos políticos.
Las divergencias entre los dos políticos se centraron, especialmente, en las sanciones impuestas a Estados Unidos contra Polonia, según explicó Haig en una conferencia de Prensa.
Estados Unidos mantuvo idéntica postura a la expuesta el martes pasado en la Conferencia sobre Seguridad y Cooperación en Europa (CSCE) y recordó a sus interlocutores que Washington considera a la Unión Soviética responsable del golpe militar en Varsovia -tema sobre el que Ceaucescu prefirió guardar silencio, según comentó Haig.
Ceaucescu nunca ha secundado los elogios del Pacto de Varsovia hacia los dirigentes polacos.
El desarme, la CSCE, Oriente Próximo y Africa Austral fueron otros temas presentes en la conversación entre el presidente de Rumanía y el secretario de Estado norteamericano. Según Haig, en ningún momento se habló del deseo rumano de que las negociaciones de Ginebra sobre las armas euroestratégicas se abran a todos los países europeos.
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