Se da por desaparecidos a los 30 tripulantes del carguero italiano hundido al norte de La Coruña

, Los treinta miembros de la tripulación del mercante italiano Marina di Acqua desaparecieron bajo las aguas al hundirse el barco en la tarde del miércoles, cuando navegaba por una zona del Atlántico situada a unas 150 millas al norte de La Coruña. Pese a que en el lugar del hundimiento se encontraron tres botes de socorro vacíos, no existen prácticamente esperanzas de encontrar con vida a ninguno de los marineros desaparecidos, vecinos de la ciudad de Nápoles en su totalidad.Una vía de agua abierta en el casco del buque por un corrimiento de la carga de bobinas de acero que transportaba desde el puerto italiano de Nápoles hasta el francés de Anvers fue la causa directa del hundimiento. El capitán del Marina di Acqua pudo transmitir antes de que el barco se hundiese una llamada de emergencia, que fue captada en la estación de radio costera de Eirís, en La Coruña, poco después de las tres de la tarde del martes.

Alertado desde la estación, el mercante de la República Democrática Alemana Theodolfo Panaquer, que navegaba por las proximidades de la zona, puso rumbo hacia el lugar donde se encontraba el mercante italiano. A las cinco de la tarde, dos horas antes de que se produjera el hundimiento del Marina di Acqua, el barco alemán comunicó por radio que se encontraba a una milla de éste. Sin embargo, cuando llegó al punto en que se encontraba el mercante italiano (coordenadas 45º 41º Norte, 9º 54' Oeste) únicamente flotaban sobre las aguas tres lanchas de salvamento vacías. El barco se hundió a las 19.28 horas, según una nota difundida posteriormente por la Capitanía de la Zona Marítima del Cantábrico.

El mercante alemán informó de la situación a las autoridades de la Marina española, que ordenaron como primera medida la incorporación del destructor Churruca, en navegación en esos momentos, a los trabajos de búsqueda de posibles supervivientes. Poco después zarparían de su base en El Ferrol el remolcador de altura AR-41, y en la mañana de ayer, el destructor Lángara.

Olas de once metros

El grupo de salvamento se completó con un avión del Servicio Aéreo de Rescate llegado desde Madrid y otro de la Marina militar francesa procedente de una base de Bretaña. El avión francés avistó en la madrugada de ayer una luz sobre el mar, a unas treinta millas del punto donde se produjo el hundimiento. Los barcos de la Armada encontraron en el lugar indicado por el avión varias manchas de aceite, pero ningún indicio de que pudiera haber supervivientes de la catástrofe.A última hora de la tarde de ayer continuaban bajo difíciles condiciones climáticas, que hacen improbable la existencia de supervivientes, los trabajos de búsqueda, con vientos de unos cien kilómetros por hora y olas de once metros de altura.

El Marina di Acqua era propiedad de la compañía paraestatal italiana Italmare Shipping Company, que lo había comprado en 1980 a una naviera británica; era un bulkcarrier de 32.000 toneladas botado en el año 1972 en Glasgow. Había zarpado de Nápoles el pasado día 24 para transportar un cargamento de bobinas de acero al puerto francés de Anvers.

Aunque el siniestro tuvo lugar en zona de competencia de la región de información de vuelo (FIR) francesa, están operando coordinadamente en el área medios británicos, españoles y franceses, aéreos y marítimos.

Desde el comienzo de la operación de socorro al buque italiano Marina di Acqua, siniestrado a 145 millas al norte de la Estaca de Vares, el centro de coordinación de salvamento francés había solicitado la colaboración, a través de su homólogo español (CRC de Paracuellos del Jarama), de medios aéreos españoles del Servicio de Búsqueda y Salvamento (SAR) del Ejército del Aire.

Entre los medios del Ejército del Aire español que colaboran en la operación se cuenta con un avión Fokker-27 (D-2) del SAR, que se incorporó a la búsqueda y rescate de posibles supervivientes o cadáveres desde su base en Gando en la noche del 29 al 30 de diciembre. En la mañana de ayer aún no se habían obtenido resultados positivos. El estado de la mar ayer era de arbolada, lo que dificultaba la acción de los buques. El avión español estuvo rastreando entre chubascos a 340 metros de la altitud para lo que cuenta con medios radar y todo tipo de auxiliares para rescate.

Asimismo se ha desplazado al aeropuerto de Oviedo un helicóptero Puma del 402 escuadrón, adscrito al SAR, para colaborar.