Los secuestradores libaneses exigen que Gadafi libere al imán Sadr
Los secuestradores del avión de la compañía aérea Libyan Airlines, con 47 pasajeros y cuatro tripulantes a bordo, que desviaron el lunes de su ruta Zurich Trípoli el vuelo hacia el aeropuerto de Beirut, han regresado a Líbano tras pasar por Atenas y Roma.El nuevo aterrizaje en Beirut se produjo a las 20.16 horas de ayer y, contra la voluntad del Gobierno libanés, que no dio nunca su acuerdo oficial al mismo, si bien lo aceptó, dado que el aparato se encontraba sin carburante y a las amenazas de los secuestradores de hacer saltar el avión por los aires.
Los autores del secuestro han precisado que no forman parte del movimiento político militar libanés Amal, sino que declararon pertenecer a un movimiento hasta ahora desconocido, denominado Fuerzas Especiales del Imán Mussa Sadr. Su intención es sacar de nuevo a la luz el caso del imán, desaparecido en agosto de 1978.
Nada más llegar al aeropuerto de Beirut, los secuestradores han exigido de nuevo que sea llenado el depósito de combustible del aparato y solicitaron víveres y mantas para los pasajeros, así como banderas chiitas (de color verde con inscripciones coránicas) y el cambio del equipo de, vuelo del aparato, pero rechazaron precisar cuál sería su próximo destino si sus peticiones eran satisfechas. "No a Gadafi el traidor. Muerte a este agente a sueldo del imperialismo", gritaron.
Los piratas aéreos exigen para liberar a sus 51 rehenes la puesta en libertad del imán Mussa Sadr, que aseguran fue secuestrado por orden del coronel libio Muamar el Gadafi.
Según informaciones recogidas por la agencia France Presse, entre los pasajeros se encontrarían ciudadanos franceses y, de la República Federal de Alemania, así como dos azafatas maltesas. El resto serían ciudadanos libios.
La agencia oficial de noticias libia, Jana, señaló ayer que los tres secuestradores del Boeing 727 son "terroristas que operan por cuenta de la Agencia Central de Inteligencia norteamericana (CIA) en el cuadro de la campaña de Estados Unidos contra Libia". La agencia oficial libia agregó que los secuestradores "se han infiltrado en la organización Amal" y añadió que uno de los piratas aéreos "no habla árabe".
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