El general Viola quiere reasumir el poder en Argentina
El presidente argentino, general Roberto Viola, se niega a someterse a una intervención quirúgica para descongestionarle la arteria coronaria derecha, obstruida en un 80%. Esta operación ha sido recomendada por el cirujano de tórax número uno de Argentina, René Favaloro, después de un exhaustivo reconocimiento en un céntrico hospital de Buenos Aires.Al parecer, el mandatario, que sufriría también otras dolencias renales y hepáticas, quiere reasumier sus funciones presidenciales a toda costa y cuanto antes, e incluso pediría la dimisión como jefe del Ejército y miembro de la Junta Militar de Gobierno al general Leopoldo Galtleri, de quien todo el mundo habla aquí como el nuevo presidente de Argentina.
El presidente Viola está siendo sustituido, provisionalmente, por el ministro del Interior, general Horacio Liendo, mientras entre bastidores se vislumbra una sorda lucha, desencadenada por la política económica del proceso militar instaurado en 1976.
El régimen militar inspirado por el ministro de Economía del Gobierno del anterior presidente, general Jorge Videla, impuso una política económica basada en el liberalismo, que ha llevado a este país tan rico, prácticamente autosuficiente en energía, a la ruina. José Joe Martínez de Hoz, un poderoso empresario liberal, estrechamente ligado a las multinacionales, contó con el apoyo incondicional para su gestión económica del presidente Videla y de la Junta, el máximo órgano de poder del Estado, integrada por los jefes supremos de las tres armas.
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