Nueva etapa de colaboración entre España y Guinea Ecuatorial

La presencia del general José Sáenz de Santamaría, que llegará el lunes a Malabo, y la visita del secretario de Estado de Comercio, Agustín Hidalgo de Quintana, anunciada para octubre, ponen de manifiesto que España y Guinea Ecuatorial buscan establecer el marco para sacar al país africano de la profunda crisis política y económica en que está sumido."Queremos emprender una nueva etapa de colaboración que nos ayude a sanear la economía y a armonizar definitivamente la sociedad guineana", ha declarado Pedro Nsué, director general de Europa y América del ministerio guineano de Asuntos Exteriores.

El general Sáenz de Santamaría, al que las autoridades guineanas rendirán honores militares por decisión personal del coronel Teodoro Obiang, llegará a Malabo acompañado por una delegación compuesta por siete oficiales y jefes de las Fuerzas Armadas.

El general llevará un proyecto de tratado de seguridad y defensa que habrá de proponer al Consejo Supremo Militar (CSM) de Guinea. "Nada ha sido aceptado todavía y todo está pendiente de discusión", han manifestado al respecto fuentes del CSM.

Este acuerdo incluye la posibilidad de formar en España una compañía de guineanos, especialmente preparada para la seguridad del presidente Teodoro Obiang. Esta compañía estaría integrada por personal muy seleccionado, al mando de oficiales y suboficiales del Ejército español.

Es probable que en las conversaciones de la delegación española con las autoridades guineanas se aborde la posibilidad de trasladar a Malabo dos lanchas de la Marina de guerra española, ante el inminente comienzo por Hispanoil de las prospecciones petrolíferas en la plataforma marina de la isla de Bioko.

A esta visita se vendrá a sumar el próximo día 5 de octubre la de Hidalgo de la Quintana, lo que refuerza la idea existente en Malabo de que las relaciones de cooperación hispano-guineana han entrado en una nueva fase que ayudará a superar la profunda crisis en que se debate el país africano.

La delegación económica española tratará de esbozar con los responsables financieros ecuatoguineanos un esquema macroeconómico, inexistente en la actualidad, que resulta imprescindible para el funcionamiento del país.