La naturaleza del cancer se conocerá por la biología molecular, según Alberto Sols
«Parece seguro que se conocerá íntimamente la naturaleza del cáncer en las próximas décadas a través de la biología molecular. Algunos de los jóvenes biólogos moleculares actuales podrán verlo», afirmó Alberto Sois, premio Príncipe de Asturias a la Investigación Científica, en el curso dedicado monográficamente a la biología molecular, en La Granda (Avilés), por la Escuela Asturiana de Estudios Hispánicos.
«El cáncer es», dijo Sols en su ponencia, «la más importante de las enfermedades indudablemente moleculares, y a nivel molecular no hay solución de continuidad entre la biología y la patología del cáncer. Serán los médicos quienes curen a los enfermos, pero serán los biólogos moleculares los que fijen las bases del tratamiento. En resumen, la biología molecuar de hoy será la patología molecular del mañana. De esta última cabe esperar en la medicina un avance en las próximas décadas tan espectacular como el registrado últimamente en la biología molecular. Las enfermedades pueden clasificarse en moleculares, no moleculares e indefinidas. Con los progresos en el conocimiento, la mayor parte de las indefinidas pasarán a ser consideradas moleculares».«Por su parte, las enfermedades moleculares pueden ser hereditarias, somáticas o exógenas. Este tipo de enfermedades fueron descubiertas hace sólo treinta años y en la actualidad se conocen ya cientos. Entre ellas destacan las motivadas por errores metabólicos innatos y por deficiencias vitamínicas endógenas». En opinión de Sols, esta década pasará a la historia como de las más decisivas para la humanidad, debido a los descubrimientos que se están alcanzando en el campo de la biología molecular. «Hasta ahora», dice, «sólo tocábamos aspectos, piezas de la vida, pero ahora tocamos la vida misma y podemos modificar la evolución humana a un ritmo increíble».
Plan de bioquimización de la medicina
Sols cree que la curación del cáncer no pasa por tratamientos como el Interferon o el Norgamen, y tiene toda su confianza depositada en el desarrollo de la biología molecular. A nivel práctico propugna el estudio bioquímico de las biopsias tumorales, que actualmente sólo son investigadas histológicamente. Reconoce la multitud de problemas pendientes de un conocimiento básico en enfermedades molecu lares no hereditarias relativas a enfermedades virales, diabetes y reumatismos, pero espera de la aplicación de la biología molecular a la medicina importantes conocimientos y avances decisivos en cuanto al diagnóstico y tratamiento de las enfermedades.Sols finalizó su ponencia con una propuesta de plan de bioquimización de la medicina en España, que debería incluir la creación de auténticos departamentos de bioquímica en la mayoría de las facultades de medicina españolas durante la próxima década: la dotación amplia de plazas de bioquímica clínica en los hospitales de la Seguridad Social, accesibles a especialistas médicos y no médicos, para hacer posible una buena asistencia con amplio margen para la investigación y el fomento general desde el fondo de investigaciones sanitarias y la comisión asesora de planos de investigación en patología molecular, por investigadores, profesores y clínicos.
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