España, en la OTAN

El Gobierno español se está preparando con deliberada seriedad para entrar en la OTAN. Hace un año anunció que tenía la intención de solicitar la adhesión con el objetivo de completar el proceso en 1983.(... ) El Consejo de Ministros de la semana última decidió solicitar la opinión del Consejo de Es tado antes de someter la propuesta al Parlamento. Esta deliberada actitud obedece no sólo a la importancla del tema para España y para la OTAN, sino también a lo delicado de la cuestión. La entrada de España en la OTAN tiene la oposición de los partidos socialista y, comunista, los dos más importantes de la oposición. La Unión Soviética se opone con toda energía, y las amenazas de Moscú juegan un papel notable en el debate.Una serie de razones han apresurado al Gobierno espanol para decidir el ingreso. La principal es el deseo de regresar a las corrientes de la actividad diplomática occidental europea después de muchos años de ausencia. Una vez que la democracia ha sido restablecida después de la muerte de Franco, la primera prioridad fue la integración en el Mercado Común; pero esto ha sido temporalmente paralizado por las objeciones de Francia. Ahora la atención se enfoca hacia la OTAN. La esperanza, no necesariamente bien fundada, es que, una vez que España haya demostrado sus credenciales occidentales por este camino, será difícil impedir su incorporación como miembro de la Comunidad.

Otra razón, menos pública, es que la participación en la OTAN mantendrá alas Fuerzas Armadas ocupadas y apartadas de la tentación de interferir en los asuntos ínternos españoles. Los oficiales españoles que encuentren a oficiales de otros países de la OTAN hallarán en éstos una actitud muy diferente con respecto a la vida pública. Pero esto no constituye garantía plena de que no intenten un golpe de Estado. No ha impedido los golpes en Grecia y Turquía. Pero sería un factor que pesaría en la balanza contra futuros golpes militares.

Por otra parte, el ingreso en la OTAN abre el camino para la ayuda.de la organización para la modernizacíón de las Fuerzas Armadas españolas, lo que el Ejército de Tierra necesita con urgencia.

Para la OTAN, la entrada de España aportará ventajas definitivas, debido a la situación geográfica del país. España se encuentra en una posición desde la que puede dirigir por mar o por aire las rutas del Mediterráneo occidental y del este del Atlántico. Las islas Canarias se encuentran en la zona de mayor tráfi co marítimo occidental, por el que llega el 65% del petróleo a Europa occidental.

Para la derecha española cuenta otro factor: el problema de Gibraltar. La mayoría de los españoles considera que Gibraltar debe volver a España, pero hay militares españoles que creen que no pueden sentarse en Bruselas junto con representantes del Reino Unido. El año pasado, el anterior Gobierno español llegó a un acuerdo con Inglaterra en Lisboa por el que sería levantado el bloqueo de Gibraltar y se abrirían negociaciones entre Londres y Madrid sobre el futuro de Gibraltar. Pero todo esto fue bloqueado por la presión de la derecha, y el acuerdo no tuvo eficacia. Ahora, el problema es encontrar una fórmula que convierta a Gibraltar en una base de la OTAN, lo que contentaría a la derecha española.

, 24 de agosto